Adiós al night club "Manila"
Adiós al night club "Manila"

Luego de dos años de juicios y tres sentencias, el juez del Segundo Juzgado Mixto ordenó el desalojo del terreno de casi 500 metros cuadrados en la zona de Boca del Río, de propiedad de Miguel Humberto Boado.

Según dio cuenta el propietario, la señora Gloria Tarazona, popularmente conocida como "Estrella", ingresó con gente contratada colocando esteras para posteriormente construir muros e instalar un club nocturno que cambió de nombre varias veces para evadir a la justicia, para finalmente fenecer con el nombre de "Manila".

La señora, que no tenía absolutamente ningún papel, podría ser denunciada ahora por la vía penal por el delito de daños y perjuicios por haber generado un perjuicio económico y de tiempo que Boado ahora espera revertir. "Sobre cómo resarcir, será un tema que analizaré con mis abogados", sostuvo el propietario.

MANO DURA. Miguel Boado pidió a las autoridades limpiar la zona de Boca del Río de otros locales que se habrían instalado por el lugar convirtiendo el sector en zona rosa.

"En la parte de abajo se habrían robado los focos, lo que debe ser repuesto para dar mayor iluminación en la noche, y espero que el municipio ponga más empeño, mano dura en clausurar estos locales, porque la misma persona habría abierto otro local a la vuelta de este terreno, llenando la zona con este tipo de negocios.

JUEZ. "Hay sentencia de primera, segunda instancia y sentencia de la suprema a favor de Boado, y otorgar la posesión de los 409 metros cuadrados, "manifestó Arturo Alí Arana, juez del Segundo Juzgado Mixto.

Definitivamente, ya están invadiendo la parte de atrás donde han instalado un tanque; esto sucede y el propietario del terreno tiene que recurrir a la autoridad, mientras que los invasores no piden permiso a nadie.

Espera que los peritos calculen los daños que se han causado. La municipalidad no ha tenido ninguna participación, ni hay algún abogado que habría influido en el proceso, señaló el propietario.

Dato

Durante el proceso Tarazona alegó que el terreno le vendió el señor Ghersy, pero nunca mostró documentos de compraventa.

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