La crisis del coronavirus originó el año pasado en el entorno laboral empleos cada vez más orientados al teletrabajo, la comunicación online y la preservación de la salud.
Este panorama no será ajeno al 2021, en donde las empresas siguen asentando nuevas necesidades que se llevaban demandando desde hace años, pero que los departamentos de recursos humanos no habían tomado en cuenta.
Para María José Gómez, directora de la Fundación Forge, las compañías analizan los principales retos y las tendencias claves para mejorar las condiciones laborales en el empleo, dentro de ellas la formación de los colaboradores en necesidades digitales, refuerzo de la comunicación interna, la salud del empleado y espacios de trabajo más seguro. “Hay que considerar que los jóvenes son los que tienen más posibilidades de acudir presencialmente a los trabajos y los adultos quedarse en casa. Por ello, la transformación digital que se viene impulsando, debe adaptarse también a las mujeres con hijos o padres solteros. Sobre todo, en tiempos de educación virtual”, señala Gómez.
BUENA ACTITUD. La experta menciona que, más que saber comunicarse vía zoom o entregar un informe on-line, los trabajadores deben contar con buena actitud, para seguir adaptándose a nuevas situaciones de cambio. “Las habilidades blandas o también conocidas como “don de gentes” serán las más buscadas por los reclutadores. Con respecto, a lo digital las propias empresas seguirán ofreciendo formación en las nuevas TIC”, añade. Resalta que un problema que se analizará en el 2021 es el estrés a causa de la hiperconectividad de los empleados, algo que las empresas deberán trabajar para mitigarla.