Centros educativos no reciben a hijos de parapléjico

!Papá queremos estudiar!, le dicen sus hijos, pero Hugo León Asto Cunyas, el pobre hombre postrado en una cama, solo los mira y llora de impotencia.

Florcita de 3 años, Mabely (5), Johan (10), Yoder (13) y Mary (14), son los vástagos de Hugo. Existen días en que los pequeños no tienen ni qué comer y sus ropitas lucen viejas, todos duermen juntos en una cama que les regalaron unos parientes.

Hasta hace meses, Hugo mantenía a sus menores, pero la volcadura del auto en el que viajaba, Pazos - Huancavelica lo dejó parapléjico. Ahora su esposa Olga Asto Manuel, es quien asume toda la responsabilidad de mantener a los niños con lo que puede.

Además tiene que cuidar a su esposo y comprarle las medicinas, porque al estar postrado se le formaron escaras en el cuerpo y sufre de una afección bronquial.

SIN MATRÍCULA. Hace unos días, Olga concurrió a la institución educativa Tupac Amaru de Azapampa para matricular a Yoder en el primero de secundaria, y le pidieron 100 soles para reservar la vacante, los otros 3 menores tampoco tienen donde estudiar.

Aunque viven en la pobreza extrema, Hugo León Asto y sus hijos no tienen SIS, ni tampoco reciben apoyo del Estado . Olga Asto demandó ayuda al arzobispo de Huancayo, Pedro Barreto. La Beneficencia de Huancayo los apoyará con medicinas y útiles.