Las calles del asentamiento humano Pío Sarobe en Azapampa (Huancayo) eran zona de guerra. Las llantas ardían, volaban cohetes y las mujeres corrían con los hijos cargados, además de llevar piedras y palos en las manos.
fuertes. “Nosotros vivimos hace 5 años aquí y el supuesto dueño quiere votarnos, pero no lo vamos a permitir porque esto le pertenece al Arzobispado y ellos nos apoyan”, increpó Evelyn Rosas Muñóz.
“¡Nadie va a entrar aquí, solo muertos nos sacarán! ¡fuera a los traficantes de terrenos!, gritaban los varones con rostros cubiertos y armados de bombas y cohetes.
Las personas estaban atrincheradas desde muy temprano y al promediar las 11 arribó un contingente de 50 policías provistos de casos y escudos para el desarrollo de la diligencia.
suspenden. No obstante tras largas discusiones entre los abogados y los servidores judiciales, el lanzamiento se suspendió ante la ausencia de la jueza encargada del desalojo. Además se temía por la vida de niños y mujeres, que estaban en medio del conflicto.
El abogado Max Villar Aranda dijo que son 10 procesos judiciales en marcha, 8 se ganaron a favor de los posesionarios y dos perdieron contra Yoni Poma. Mientras que el abogado Antonio Castro García señaló que primero se tienen que resolver el proceso judicial entre el Arzobispado y Georgina Poma. Los vecinos del Echadero se alegraron ante la suspensión del desalojo, pero dijeron que se mantendrán alertas porque saben que en cualquier momento se fijará nueva fecha y esperarán el momento.
“Juntos e Esta es la segunda vez que programan un desalojo en el asentamiento humano Pío Sarobe en la anterior oportunidad fue contra la familia Gamarra, aquella vez también se atrincheraron.