Dante Grados, el hacedor de la banda presidencial

Mientras Dante Grados Palomino terminaba la noche del 5 de junio, fecha en la que se realizó la segunda vuelta, la banda presidencial que le habían encargado para Pedro Pablo Kuczynski, se preguntaba, ante el estrecho margen de votos que lo separaba de Keiko Fujimori, si el distintivo de mandatario de la República que estaba elaborando sería usado por el ahora presidente electo.

“En un principio la diferencia (de votos) era alta. En la noche yo estaba sudando porque veía que la señora Keiko seguía subiendo. Dije, de repente va a seguir subiendo y no va a ser Kuczynski el presidente. Sudaba porque me daba angustia haber vendido la banda presidencial y que Kuczynski no vaya a ser para el presidente”, relató el artesano Grados Palomino sobre aquellas horas en que parecía que los resultados electorales podían dar un giro.

Pero no solo las cifras de la ONPE, sino la tradición, se encargaron de confirmar que su familia continuaría elaborando la banda presidencial. El 6 de junio, al entregarla, Grados Palomino también confirmó que al igual que su fallecido padre, Dante Grados Farro, desde la época de Manuel Odría, él haría la banda para el Presidente de la República.

CUESTIÓN DE RIESGO. Grados Palomino cuenta que días antes de la segunda vuelta dos allegados de Kuczynski lo llamaron para encargarle que elabore una banda para él. Por respeto a la tradición de su padre, se niega a revelar el nombre de aquella persona que le encargó el trabajo. Solo contó que se trataba de un hombre que lo apresuró para que se la entregue el 6 de junio.

“El día que me llamó me dijo la necesito para hoy día porque hoy salgo de viaje y no voy a poder entregársela sino hoy día”, recuerda Grados sobre las palabras de su presuroso cliente.

De esta manera se continuaba la tradición que un amigo, familiar o compañero de trabajo del futuro presidente encargue a una bordaduría la banda, la cual le será obsequiada al mandatario.

LA BANDA. Desde los 14 años, Grados empezó a formar figuras sobre telas con hilos de colores. Con sus dedos morenos bordaba con agujas y trabajaba en los bastidores que su padre tenía en la sala de su casa.

La banda que le encargaron para Kuczynski no será la primera que ha elaborado para un presidente, pero sí la que terminó de bordar junto con su familia luego de que su padre la iniciara.

Su progenitor dejó una banda presidencial inconclusa y él solo tuvo que darle unos toques finales.

El ahora cabeza de la Bordaduría Dante cuenta que la confección del distintivo puede demandar hasta tres meses. Debido a que el trabajo es prolongado, suelen tener algunas bandas listas en caso alguien llame para solicitar una.

Está hecha con un seda francesa llamada “raso moire”. “Tradicionalmente siempre se usó esa tela para la banda presidencial. En- Francia siempre se usa esa tela para las bandas. Es una tradición francesa esto de las bandas”, explicó.

Los hilos con que se borda el escudo son metálicos de 24 kilates, al igual que los utilizados en la figura que asemeja una piña que cae al final.

Todo este trabajo tiene un costo que multiplica por varias veces un sueldo mínimo, pero que Grados prefiere no precisar por temor a la delincuencia. “No se dan cuenta que los materiales son carísimos y que nos demoramos tres meses en hacerla. Al repartirlo viene a ser un costo modesto”, finaliza.