Hace dos años un terremoto azotó Pisco y el cementerio general no fue ajeno a esta desgracia, cuyas huellas se pueden ver hasta hoy. Los ataúdes, con cadáveres incluidos, están expuestos, pues aún no han terminado de remover los escombros. La situación causa malestar en los deudos, sobre todo ahora que falta pocos días para conmemorar el Día de Todos los Santos. Ninguna autoridad se ha pronunciado al respecto.