Justicia popular. Dos de los cuatro delincuentes que minutos antes asaltaron y asesinaron a balazos al dirigente del poblado de Andas, distrito de Jacas Grande, provincia de Huamalies, Alejandro Guardia Salazar fueron quemados vivos por enardecidos pobladores que salieron en defensa del también pastor evangélico.
Por orden del representante del Ministerio Público, los tres cuerpos fueron trasladados a la morgue del hospital de Llata para ser sometidos a necropsia de ley.
Ambos ajusticiados aún no han sido identificados.