Lambayeque no esta preparado para 'fenómeno' laboral de Proyecto Olmos
Lambayeque no esta preparado para 'fenómeno' laboral de Proyecto Olmos

Como un sueño que podría convertirse en pesadilla ven algunos expertos la enorme brecha laboral que abrirá la operatividad del Proyecto Olmos en nuestra región, el mismo que creará más de un millón de empleos, para los cuales gran parte de los lambayecanos no están preparados.

Sobre el particular, el coordinador regional de la Ventanilla Única de Promoción del Empleo y director de Promoción de Empleo y Capacitación Laboral de la Gerencia Regional de Trabajo, Francisco Guzmán Enriquez, exteriorizó su preocupación por este tema.

PANORAMA. Para el también abogado (Guzmán Enriquez), la puesta en marcha del Proyecto Olmos hará realidad en un primer momento el riego presurizado de 38 mil hectáreas nuevas en el desértico valle de Olmos, así como el mejoramiento agrícola de 5,500 hectáreas de tierras de propiedad de los agricultores del Valle Viejo y la Comunidad Campesina Santo Domingo de Olmos, quienes contarán con infraestructura hidráulica a cero costo. "Según los estudios realizados con anticipación, la operatividad del Proyecto Olmos, solo en el rubro agrícola, permitirá la creación mínimo de 3 puestos de trabajo por hectárea", enfatizó Guzmán Enriquez.

El funcionario de la Gerencia Regional de Trabajo remarca que el objetivo primordial es crear un polo de desarrollo económico, así como el mejoramiento de las condiciones de vida de la población en el norte del país, mediante el aprovechamiento hidroeléctrico de los recursos hídricos de los ríos a trasvasarse. "Se trabajarán 43,500 hectáreas con cultivos diversos, las cuales generarán solamente en este rubro, empleos directos en la venidera década para no menos de 40 mil personas. A esto debemos agregar que también habrá espacio para puestos de trabajo indirectos, los cuales devendrán de servicios colaterales como: plantas industriales, fletes, comercio, educación, salud, turismo, etc., todo esto, según los cálculos y estudios, propiciará trabajo directa e indirectamente para más de un millón de personas", refirió.

Luego de este análisis, el funcionario plantea una interrogante válida, ¿cuántos de los lambayecanos están preparados en los quehaceres técnicos que el Proyecto Olmos necesitará en su parte operativa?. "Es decir, y en pocas palabras, tenemos en el papel o en teoría, una gran avalancha de ofertas de trabajo a la vuelta de la esquina, pero es una cantidad mínima de lambayecanos los que están preparados para acceder a esta", señaló Guzmán Enriquez.

DEJADEZ. Buscando ahondar más en esta situación, diario Correo fue en busca del presidente de la Cámara de Comercio de Lambayeque, Otto Zoeger Navarro, quien confirmó el tremendo descuido en el cual hemos caído. "De esto la región Lambayeque fue advertida en el año 2001, cuando yo ejercía el cargo de presidente del entonces Consejo Transitorio de Administración Regional (CTAR), hoy gobierno regional. Fue porque invitamos a una comisión del Proyecto Chavimochic (La Libertad), la misma que nos remarcó algunos problemas a suscitarse debido a la avalancha laboral que se veía venir y, que ellos en Trujillo tuvieron igual vivencia, es decir, nos hablaban con la experiencia", reveló Otto Zoeger.

El titular de la Cámara de Comercio evoca que en aquella ocasión, hace 12 años atrás, los funcionarios de Chavimochic advirtieron principalmente dos cosas, entre estas, tener mucho cuidado con la mayor tugurización, tal como les pasó a ellos en Trujillo. "Tugurizar más a Chiclayo con miles de personas que llegarían por las ofertas de trabajo que se avecina, sería desaparecerlo del mapa; para eso finalmente se contempló crear una nueva ciudad, un nuevo Olmos, que me parece interesante.

La otra advertencia fue la falta de capacitación de mandos medios para el manejo de la enorme demanda laboral que se vivirá, tarea en la cual ninguna de nuestras autoridades, a pesar de los años y de lo dicho, se han interesado. Debemos pensar que las fuentes de empleo no solo se darán con operarios para el agro, sino que además se construirán fábricas (construcción civil) y estas necesitarán personal para laborar en las mismas, etc.", explicó. Zoeger recordó que cuando las grandes empresas como: Ripley, Tottus, Saga, entre otras llegaron a Chiclayo, trajeron operarios y soldadores de Lima para construir sus edificios, porque los de acá no tenían certificación.

"Las que no se libran de esta crítica son las 13 universidades que hay en la región, las mismas que no han tenido, junto con nuestras autoridades, la visión necesaria para dictar cursos de capacitación y certificación para los técnicos de acuerdo a las especialidades que se necesitarán cuando entre en operatividad el Proyecto Olmos", subrayó.

Zoeger señala que tampoco se ha guiado al capital privado, en especial el de la construcción, a invertir en los distritos aledaños a Olmos y en esa misma ciudad. "Debemos pensar que todo este mar de gente vendrá y necesitará hoteles, restaurantes, supermercados, etc., y Olmos con sus al rededores no lo tienen, ni tampoco creo que Chiclayo soporte tanta avalancha de gente", indicó Zoeger Navarro.

Por último, Otto Zoeger sugirió brindar las facilidades en los distritos cercanos a Olmos y en esa misma ciudad, para que la gente del lugar vaya preparando sus viviendas como eventuales hospedajes y pensiones, lo cual generará más fuentes de trabajo, mientras se prepara un verdadero plan para hacerle frente al 'tsunami' laboral. "La idea de crear la provincia de Olmos es la más viable, pero para esto se necesita compromiso e inversión de los principales actores de toda esta historia", acotó el empresario.