La mejor manera de reducir el riesgo de cáncer de pulmón es no fumar y evitar el humo de las personas que fuman, afirmó el director médico del Centro Detector del Cáncer, Mauricio León Rivera.
El especialista también dijo que cuando una persona deja de fumar antes de que surja el cáncer, el tejido dañado de sus pulmones gradualmente comienza a repararse por sí solo, sin importar la edad o el tiempo que haya fumado.
“La gente que deja de fumar antes de los 50 años, reduce a la mitad su riesgo de morir en los próximos quince años en comparación con aquellas personas que continúan fumando”, remarcó el cirujano oncólogo de la clínica Ricardo Palma.
La epidemia mundial de tabaco mata cada año a casi seis millones de personas, de las cuales más de 600,000 son no fumadores que mueren por haber respirado humo pasivamente.
“Si no actuamos, a partir de 2030 la epidemia matará cada año a más de ocho millones de personas. Más del 80% de esas muertes prevenibles se registrarán entre personas que viven en países de ingresos bajos o medianos”, señaló.
Cada año, el 31 de mayo, la Organización Mundial de la Salud y sus asociados celebran el Día Mundial Sin Tabaco, con el fin de destacar los riesgos para la salud asociados al consumo de tabaco y promover la aplicación de políticas públicas eficaces para reducir ese consumo. (Andina)