Un presunto delincuente fue capturado en el momento preciso cuando estaba a punto de cometer su fechoría y no se le ocurrió mejor forma que romper en llanto y pedir misericordia para no ser llevado por la Policía. El hecho ocurrió en Trujillo.
El sujeto identificado como Luis Gómez aprovechó que la puerta de un almacén de útiles escolares estaba abierta para ingresar sin autorización y buscar qué objetos llevarse.
Para fortuna de la dueña del negocio, un trabajador se percató de la presencia del presunto delincuente y dispuso a inmovilizarlo para que no escape.
Al ver que no tenía salida, Gómez empezó a llorar de manera desconsolada y se arrodilló para implorar que no lo entreguen a la Policía.
Todo fue grabado por las cámaras de seguridad del almacén, según las imágenes que mostró Latina.
El sujeto fue llevado a la comisaría por la Policía y según la dueña no es la primera vez que asaltan su negocio, porque en ocasiones anteriores perpetraron, con arma de fuego, su local.