Un milagro de Navidad. La pequeña Romina Cornejo, quien quedó cuadripléjica tras ser baleada durante el frustrado asalto de una banda de “marcas” en la vía Expresa, empezó a sonreír y a pronunciar sus primeras palabras tras varios meses. Aunque la menor de tres años continúa internada en el Instituto Nacional de Salud del Niño (ex Hospital del Niño), su ahora mejor semblante y el hecho de que haya empezado a conversar ofrecen esperanzas sobre su pronta recuperación. “Diosito me quiere. Mamita, te quiero mucho. Te extraño mucho, hermanito”, fueron algunas de las primeras frases mencionadas por Romina, propaladas ayer por el programa Séptimo Día. En el video, la menor, muy alegre y sonriente, le pide a su mamá ir a su casa y le manda saludos y besos a su hermano, padre y tía. “Mami, vamos a la casa. Quiero ir a casa”, afirmó Romina, quien ahora entona feliz una canción junto a su madre. Como se recuerda, la pequeña quedó en estado de coma luego de recibir un impacto de bala que prácticamente le destrozó parte de la médula espinal. El vil ataque se produjo en agosto último, cuando delincuentes armados intentaron asaltar a los abuelos de Romina cuando viajaban en su vehículo.