El empresario cafetero Héctor Llacuarimay Sicha (39) fue asesinado de seis balazos por dos sicarios en Santa Anita.
El ataque de los hampones se dio cuando la víctima intentaba abrir la puerta del edificio donde, desde hace cinco meses, alquila el tercer piso junto a dos parientes.
La madrugada de ayer, Llacuarimay estaba acompañado de una mujer que terminó ilesa. Los familiares del negociante dijeron no conocerla. Ella solo les narró lo ocurrido y se fue del lugar. Los agentes de la Divincri Ate investigan la identidad de la testigo presencial del crimen.
ATAQUE. Pese a que el comerciante corrió para salvar su vida, luego fue alcanzado por los desconocidos, quienes lo balearon en el cuello, una mano y la espalda. Tras el crimen, los pistoleros escaparon en una camioneta blanca que los esperaba en la esquina de la Mz. G, Lt. 7 de la cooperativa Miguel Grau.
Mayra Vergaray contó que su tío se dedicaba al negocio del café desde hace más de 20 años. El empresario llevaba la mercadería desde Pichanaki, su tierra natal, a Lima.
“También creemos que puede ser porque mi tío hacía préstamos. De repente ha sido por una deuda que no le han querido pagar. Él hacía sus préstamos con compra y venta, o sea, le das tu carro y él te presta el dinero”, agregó Vergaray.
Entierro
Sus familiares dijeron que la víctima era padre de dos niñas. Además, señalaron que será enterrado en Pichanaki.