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La comunidad campesina de Santa Bárbara cumple 541 años de fundación en Huancavelica, más de cuatro siglos llenos de historia.

El 3 de diciembre de 1563 fue fundada Santa Bárbara, 9 años antes que la actual capital de la región, por ello también la conocen como la pionera de Huancavelica. Fue reconocida como “La Descubridora” en 1620 y en 1950 la resolución suprema 034 le da el título de Comunidad Campesina.

HISTORIA. Cuentan que el año de 1563 un nativo llamado Ñahuincopa mostró al español Amador Cabrera de la existencia de la mina de azogue.

Se sabe que existe la posibilidad de que esta mina haya sido conocida antes de la llegada de los españoles, debido a que antiguos peruanos usaban el llimpi, sulfuro de mercurio, el cual generalizaron entre mujeres y guerreros de la nobleza para pintarse el rostro.

Posteriormente, Santa Bárbara se constituyó en una de las minas más imponentes de la época. Se sabe que sus socavones eran tan altos que podían ingresar montando caballo y que en el interior existía una verdadera ciudad, con casas, calles y hasta contaba con una plaza de toros de la cual casi ya no quedan vestigios.

MINA DE LA MUERTE. Según datos históricos es incalculable la cantidad de nativos que murieron en su interior durante su explotación.

Cuentan que a ella entraban personas andinas en forma obligatoria para ello la corona estableció la mita minera, donde todos los que habitasen a 200 leguas a la redonda de la mina fueran traídos a Santa Bárbara.

La mita minera durante el periodo colonial fue un trabajo obligatorio e inhumano para los varones entre 18 y 50 años a favor del Estado Español.

La tradición relata que los indígenas al momento de ser obligados solo llevaban consigo su “quipi” con fiambre, coquita, un poco de licor y una vez adentro de la mina nunca más podían ver la luz y morían en el interior de hambre, de frío, accidentes, o si salían vivos los mataba las intoxicaciones y accidentes propios del trabajo en los socavones.