Huánuco: después de nueve días liberan a Darwin Atachagua (FOTOS)

Después de nueve días de permanecer en mano de sus captores, el hijo del empresario David Atachagua Malpartida, Darwin Anderson Atachagua Gómez (21), fue liberado en la jurisdicción del poblado de Quio, distrito de Cayna, provincia de Ambo.

El joven que aún llevaba puesta la ropa que vestía el día de su plagio, fue encontrado por su familia caminando desorientado cerca al puente Parcoy.

Su padre, quien recibió una llamada de los secuestradores informándole que su hijo iba a ser liberado, alertó a la Policía cuyos agentes de las diferentes unidades llegaron a la provincia de Ambo, para ejecutar operativos tendientes a ubicar al joven empresario.

Antes del mediodía, Atachagua Gómez fue ubicado por sus parientes, quienes de inmediato decidieron trasladarlo a Huánuco para luego llevarlo a una clínica particular, donde por varias horas fue examinado por el médico Álvaro Fernández.

Según contó el galeno, el reencuentro con su esposa, sus padres y otros parientes fue conmovedor. "Todos lloraron abrazándose", relató.

Al ser interrogado por la Policía, Darwin habría dicho a las autoridades que todo este tiempo permaneció en un cuarto oscuro y frío, donde le alimentaban dos veces al día.

Dijo también que era cuidado por dos personas, a quienes no logró ver su rostro.

LIBERACIÓN. Respecto a su liberación, existen dos hipótesis, la primera sería que la familia pagó la mitad del monto que exigían. Y la segunda es que los malhechores al sentirse acorralados por los policías antisecuestros de Lima, optaron por dejarlo libre.

El fiscal Eder Chávez, quien dirige la investigación policial, dijo que tras la captura de Meyer Rosales Lucas (33) preso en el penal de Potracancha, los delincuentes estaban acorralados, razón por la cual lo liberaron, pero no quiso hablar si la familia pagó el rescate.

PLAGIO. El 4 de agosto a las 7:30 de la noche Darwin, fue secuestrado cuando llegaba a su casa ubicada en la cuadra 4 de la Av. Esteban Pavletich, en Amarilis. Horas después del celular del agraviado, su esposa Enilt Pando Ibarra (23) recibió una llamada, donde pedían hablar con su suegra Elva Gómez. A través de llamadas telefónicas exigían 4 millones de soles por su rescate.