Un niño de 7 años murió en extrañas circunstancias pues fue evacuando al hospital de Tarma donde le practicaron lavados gástricos por tener diagnóstico de envenenamiento, pero lamentablemente el niño perdió la vida
Según se conoce el niño identificado con las iniciales K.C.M. (07) habría consumido un trozo de pollo a la brasa y a los pocos minutos empezó a convulsionar y con fuertes dolores estomacales fue derivado al nosocomio tarmeño.
Los familiares del menor han manifestado que por el barrio San Cristóbal en Tarma, lugar donde viven, por la cantidad de canes que deambulan alguien habría arrojado pollo con veneno, "Él (niño) nunca recoge nada del suelo, es incomprensible como llegó a comer ese pedazo de pollo", indicaron.
La madre del niño, tuvo que ser internada en el hospital pues se desmayó hasta tres veces al no soportar la noticia de la muerte de su hijo.