Hoy se cumplen 10 años del terremoto que sacudió la región Ica y que tuvo epicentro en la provincia de Pisco. Dejó 590 muertos aproximadamente, cientos de heridos, miles de damnificados, cuantiosas pérdidas económicas y ciudades destruidas.
En medio del dolor y sufrimiento está José Luis Tipacti Peñavásquez, conocido como “Chicho”, el niño símbolo del terremoto, aquel ángel del pueblo al que hoy miles de personas veneran y le piden salud, prosperidad y cuidado para sus seres queridos.
La devoción por el pequeño “Chicho” ha crecido en estos 10 años y a diario aproximadamente 500 personas visitan su capilla, según cuenta una de las mujeres que trabaja vendiendo velitas misioneras y recuerdos al costado.
En el interior de la capilla hay miles de fotos colocadas por devotos que buscan protección, salud y bienestar para sus familiares.
Mucho de sus fieles le atribuyen una serie de milagros. Milton Caipo llegó desde Villa El Salvador (Lima) hasta la capilla de “Chicho” para pedir por sus hijos y familiares que se encuentran enfermos. “Vengo desde Villa El Salvador para pedirle que cuide a mi hijito y a mi tía que está enferma”.
La devoción por el “niño santo” de Ica es muy grande y para fechas como su cumpleaños, el 20 de julio, hay celebraciones con gran concurrencia de personas.
Hoy, fecha en que debía tener 19 años, a las 18.00 horas se estará realizando una misa en su capilla por los 10 años de su muerte. Miles de iqueños le estarán rindiendo homenaje póstumo.
A “Chicho” sus fieles ya le atribuyen muchos milagros y por ello se ha convertido en un santo del pueblo.
TRAGEDIA. El pequeño fue encontrado debajo de unos fierros de la ventana de una casa de adobe que se cayó en la calle Ayacucho, a unas cuadras de su vivienda. Aquella tarde del miércoles 15 de agosto de 2007, “Chicho” había salido con dirección a una cabina de internet.
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