La ropa ya no solo debe servir para vestirse, también puede cuidar nuestra salud. A eso aspiran los científicos peruanos que vienen trabajando en el desarrollo de materiales textiles con propiedades antimicrobianas, antimicóticas, repelentes y con protección ultravioleta (UV). Un equipo de 15 investigadores trabaja en perfeccionar un proceso que le otorgue a las telas las propiedades de protección antes mencionadas pero sin afectar su textura.

Cómo lo hacen

De la mano de la nanotecnología, se desarrolla un proceso de microencapsulación por el cual se encapsulan diminutas gotitas de líquido (del ingrediente activo que le confiere al producto propiedades funcionales), para luego recubrirlas con una película continua de un material polimérico.

El proyecto plantea obtener textiles y cueros antimicrobianos funcionalizados con nanopartículas de óxido de cobre (CuO), además de textiles con protección UV el cual se logra con nanopartículas de óxido de zinc (ZnO) y con microcápsulas que contienen aceites esenciales de la planta palo santo, se busca darles a los textiles propiedades antimicóticas y que repelen a los mosquitos.

NECESARIO

“La protección a la radiación UV es muy importante debido a que se están registrando niveles extremadamente altos, uno de los tipos más comunes de cáncer a la piel está directamente relacionado con la exposición a esta radiación. Asimismo, en diferentes regiones del país, los mosquitos pueden transmitir enfermedades como dengue, zika, malaria, fiebre amarilla o chikungunya, enfermedades que tienen un impacto significativo en la salud humana, es por ello que es necesario contar con indumentaria con características apropiadas”, señala el doctor en física José Luis Solís Véliz, investigador principal del proyecto.

Él junto a su equipo han probado este novedoso proceso en telas de 100% algodón, logrando grandes resultados, como que el textil mantenga el 99% de sus propiedades agregadas luego de 20 lavadas. También han probado en telas compuestas de 65% de poliéster y los resultados han sido superiores, siguen protegiendo después de 35 lavadas. “Estamos en las pruebas finales del proceso con nanopartículas de óxido de cobre (CuO), ya hemos procesado 300 metros de tela. En paralelo estamos probando este proceso en dos tipos de cuero, vacuno y de paiche para ver en cuál se impregna mejor”, agrega el físico.