Una vez más nuestra selección de fútbol nos regaló una inmensa alegría en el encuentro con Bolivia en la Copa América. Los gritos a todo pulmón de millones de peruanos, confirmaron una vez más que la fe sigue intacta. Ayer todos rebozamos de felicidad infinita y nos sentimos, por instante, invencibles.
Festejo. Todos los lugares donde un televisor transmitía el partido de fútbol, se convirtieron en centros de festejo y algarabía, la gente gritaba en sus casas, centros comerciales, restaurantes y hasta en las combis y taxis que seguían por radio el encuentro que jugaba nuestra selección por su pase a semifinales en la Copa América, la gente celebró a su manera.
Muchos se animaron a gritar "Ahora más que nunca, tengo el orgullo de ser peruano y soy feliz".