Dos de los ocho revoltosos detenidos durante las protestas en Manchay serían juzgados por la Ley de flagrancia tras ser identificados cuando incitaban a los manifestantes y bloqueaban las vías por estar en contra del ingreso de los buses del corredor Javier Prado-La Marina-Faucett.

Ellos son Dionisio Chacchi Gómez (31) y Robinson Velásquez Cucho (27), quienes serían procesados por los delitos de disturbios y obstrucción a las vías de comunicación, revelaron fuentes de la Policía.

Ambos fueron entregados a la Policía de Manchay y puestos a disposición de la Novena Fiscalía de La Molina.

Otros detenidos. La PNP informó que los otros seis detenidos son Johny Huanaco Flores (20); los hermanos Serapio y Crispín Aquino Lara de 39 y 25 años, respectivamente; Rubén Tacco Sacsarea (27); Jeison Huamán Castellanos (20) y Cristoper Fernández Allauca (19).

Según agentes de Inteligencia, ellos se apostaron en los cerros para enfrentarse a la Policía lanzándoles piedras, llantas y otros objetos contundentes. Fueron entregados a la comisaría de Cieneguilla.

El abogado penalista Mario Amoretti opinó que, de acuerdo con el Código Procesal Penal, la sanción que recibirían estos vándalos es de 4 a 8 años de pena privativa de la libertad.

“También deberían ser juzgados los dirigentes por ser autores intelectuales de los daños a la propiedad pública y privada”, precisó. De cumplirse la ley, dijo que se trataría de una sanción ejemplar.

Manchados

José Chuquillanqui, párroco de Manchay, se mostró indignado por la actitud de algunos vecinos tras manchar la buena reputación de la comunidad.

Te puede interesar:

Lima suspende ruta vial en Manchay