Las autoridades sanitarias de Puerto Rico anunciaron hoy que hasta el momento se han confirmado un total de 157 casos de zika en la isla, de los que 14 son mujeres embarazadas, para cuyos futuros hijos este virus supone una particular amenaza.

El Departamento de Salud de Puerto Rico actualizó hoy los datos sobre la incidencia de zika en la isla, aunque se sospecha que el número de afectados puede ser mucho mayor, ya que por lo general este virus produce síntomas leves en una población que, además, está ya acostumbrada al dengue y el chikunguña.

Esos dos virus se transmiten a través del mismo mosquito que el zika, pero están más extendidos en la isla y su efecto sobre la salud de la población general es más grave.

Entre los 157 casos confirmados de zika en Puerto Rico, el Departamento de Salud detalló que seis de ellos corresponden a personas que tuvieron que ser hospitalizadas.

La mayor incidencia se ha detectado entre personas de 40 a 64 años, seguidos de los de entre 20 y 39 años. Entre todos los afectados al menos una persona desarrolló el transtorno neurológico conocido como síndrome de Guillain-Barré.

Sólo en la última semana se han confirmado 40 nuevos casos, entre ellos el de 9 embarazadas, y con una nueva hospitalización.

Ante este rápido incremento de los casos de zika, un virus cuya presencia en Puerto Rico se confirmó por primera vez el pasado 31 de diciembre, las autoridades sanitarias insistieron hoy en la importancia de tomar medidas de prevención.

Así, se insta a la población a usar repelente de mosquitos y ropa adecuada, y eliminar los criaderos de estos insectos, inspeccionando y sellando los pozos sépticos y erradicando cualquier acumulación de agua al aire libre.

“El aumento de casos nos responsabiliza a tomar todas las medidas de prevención. Trabajando en conjunto Gobierno, comunidad y empresas privadas podemos reducir el riesgo de contagio”, dijo hoy la secretaria de Salud, Ana Ríus, al presentar estos datos en una conferencia de prensa.

Las autoridades también animan a la población a que coloque telas metálicas antimosquitos en puertas y ventanas y que los niños acudan a las escuelas protegidos con repelente, pantalones largos y ropa de colores claros.

El director ejecutivo de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Aemead), Ángel Crespo, detalló que también se han revisado hasta el momento 22 cementerios de la isla para evitar la acumulación de agua estancada.

A principios de este mes, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades confirmaron que el virus podía ser transmitido sexualmente. 

EFE

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