En la trama de los más recientes audios emergen dos empresarios poco conocidos por la opinión pública: Antonio Camayo (Iza Motors) y Mario Américo Mendoza Díaz (del sector textil).
A juzgar por los audios del Ministerio Público, Mendoza sorprende por sus vínculos con altos funcionarios del Estado y su peso sobre ellos.
El congresista Juan Sheput lo describe como un filoaprista de vieja data, muy cercano a Alan García desde fines de los 80. “No es una persona cualquiera en la estructura empresarial del APRA”, sostiene.
Según Víctor Andrés García Belaunde, cuando un empresario es tan cercano a los jueces es porque tiene juicios. Poco se sabía, hasta ahora, sobre su trayectoria en los negocios y la política. Las grabaciones lo muestran como un pez en el agua dentro del sistema judicial.
En el 2009, César Vásquez Bazán, exministro de Economía de Alan García y más tarde su enemigo político, publicó un blog donde aseguró que Mario Mendoza le regaló al joven líder del APRA un costoso auto Citroën. Añade que Mendoza y Luis Nava (secretario de García) se conocieron en una logia masónica y son amigos desde entonces.