Carlos Ramos (Foto: Correo)
Carlos Ramos (Foto: Correo)

El magistrado afirmó que entre los integrantes del Tribunal Constitucional () existen posturas ideológicas que se evidencian cuando deliberan sobre casos elevados hasta esta instancia.

Ello, tras ser consultado sobre la decisión, adoptada por mayoría, del máximo intérprete de leyes, de declarar infundada la demanda competencial por la disolución del Parlamento.

“Creo que no puede negarse el componente, no solamente constitucional, sino también político-ideológico que encerraba la propuesta y las posiciones que abrazaban los colegas integrante del TC”, sostuvo en Canal N.

“Si consideramos que (el tema de la demanda competencial) es un asunto netamente jurídico, nos equivocamos. Hay componentes de carácter político como jurídico. La nuestra no es una corte de justicia ordinaria”, recalcó.

Ramos sostuvo que el aspecto político de las deliberaciones de cada tribuno responde a políticas públicas y no a un sentido partidario. Y justificó esta lectura al señalar que un aporte de los altos tribunales, no solo en Perú, “tiene componentes de carácter político, como también jurídico, que no pueden ser suprimidos del debate”.

Modelo

Para ejemplificar dicha consideración, el magistrado manifestó que en temas relacionados a la comunidad LGTBI, los tribunos José Luis Sardón, Ernesto Blume y Augusto Ferrero muestran “una línea conservadora”.

“El doctor Miranda también hasta la fecha tiene una posición más bien conservadora”, respondió acerca de la postura del tribuno en el caso de Óscar Ugarteche, vinculado al reconocimiento del matrimonio igualitario.

Asimismo, dijo que estas diferencias se evidencian cuando el TC resuelve demandas tributarias.

Ramos consideró que Marianella Ledesma, presidenta del tribunal, es “francamente de izquierda”, y que Eloy Espinosa-Saldaña está “un poco menos a la izquierda que Ledesma”. Por su parte, él se calificó “como un hombre de centro izquierda o de centro”.