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Los jueces supremos  y Josue Pariona Pastrana se inhibieron de conocer -por segunda vez- el pedido de extradición del empresario , refugiado en Bolivia. 

Ambos magistrados -según comentaron fuentes judiciales- se han inhibido a fin de no entorpecer el proceso, debido a que ambos ya habían trazaron un línea dura respecto a los fundamentos para denegar la extradición. 

Correo se comunicó con el magistrado Javier Villa Stein quien confirmó su inhibición y la del juez supremo Pariona.

“Ayer lunes hemos decidido apartarnos pensando en que como en el caso concreto ya habíamos adelantado opinión sobre el pedido, consideramos prudente que piensen que tenemos interés en al causa o se dude de la imparcialidad”, dijo a Correo.

ACTO DILATORIO. Sin embargo, Javier Villa Stein se mostró sorprendido porque a pesar de su inhibición, el procurador Anticorrupción Joel Segura, decidió recusar a toda la Sala Suprema encargada de evaluar el caso.

Esto, según explicó, es una medida dilatoria pues obligaría a cambiar de sala y el proceso de extradición demoraría más tiempo del estimado. 

“Lo delicado es que hicieron un pedido dilatorio, porque el trámite de esta recusación podría dar lugar a que se cumplan los plazos y no resolver la extradición. No obstante, Segura -sabiendo de la inhibición- ha planteado una recusación contra toda Sala, incluyendo al doctor Segundo Morales, que ya no es juez desde hace 15 días”, comentó Villa Stein tras calificar de distraído al defensor del Estado. 

“Un observador distraído podría pensar que la responsabilidad es del Poder Judicial”, agregó. Ahora, con la recusación en ciernes, otra sala deberá pronunciarse.