Un día después de quebrarse en un acto público y asegurar que “lo que pasará mañana está en manos de Dios”, Francisco Petrozzi, el tenor lírico que ejercía como ministro de Cultura, se alejó del cargo que la noche del martes puso en manos del presidente Martín Vizcarra. El jefe de Estado decidió aceptar su renuncia.

Petrozzi se va en medio de cuestionamientos que pusieron en entredicho el compromiso del Gobierno con la pluralidad informativa en los medios del Estado. Esto ocurrió tras la destitución del periodista Hugo Coya como presidente del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú (IRTP) luego de una extensa cobertura al fallo del TC que terminó con la excarcelación de Keiko Fujimori.

La dimisión de Petrozzi se suma a la de los ministros Jorge Meléndez (Midis) y Zulema Tomás (Salud).

salida. Durante un evento en San Isidro, el presidente Martín Vizcarra decidió zanjar el tema y dio el anuncio.

“El señor Petrozzi ha presentado su carta de renuncia, la cual ha sido aceptada”, manifestó.

Aunque prefirió no ahondar en detalles sobre la dimisión, garantizó que en los próximos días designarán “un reemplazo para continuar con las tareas en el sector”.

Más temprano se conoció un chat entre Petrozzi y Hugo Coya del 28 de noviembre. En dicha comunicación, el periodista propone al ministro presentar su carta de renuncia el 9 de diciembre, a su retorno de Londres, donde se reuniría con representantes de la BBC News.

En diálogo con Correo, Hugo Coya precisó que “una cosa es una renuncia y otra una destitución en medio de un viaje oficial”.

“Se destituye solo a un funcionario que ha cometido alguna falta grave. ¿Entonces la razón de fondo que surge es si yo estaba dispuesto a renunciar? ¿Por qué me destituyeron a toda prisa (...)?”, expresó el periodista.

CríticasEl analista político José Carlos Requena sostiene que la salida de Petrozzi pone a la defensiva al Mandatario. “En una situación en que no tiene oposición (...), el Ejecutivo está gobernando sin Congreso que lo fiscalice”, explicó a Correo.

Recordó el obstruccionismo del que solía hablar Vizcarra.

“El obstruccionismo del que se acusaba al Congreso disuelto... Termina siendo el propio Ejecutivo el que se destruye”, resaltó.

Para Fernando Rospigliosi, la salida de Petrozzi se da para evitar que el Presidente pierda popularidad, a pesar de ser el responsable de la destitución de Hugo Coya del IRTP.

“Se demoró varios días, pero cuando vio que iba creciendo la crítica, (lo sacó). Él no tiene lealtades con nadie con tal de evadir responsabilidad”, afirmó.

Además, el analista aseguró que al Presidente no le importa la cartera de Cultura.

“Sin duda esto afecta el desempeño del sector al no haber continuidad. Es el tercer ministro que sale en el corto tiempo que lleva el gabinete Zeballos”, sostuvo.