Más allá de sus críticas respecto del fallo del Tribunal Constitucional (TC) que por mayoría dispuso la libertad de Keiko Fujimori, el fiscal provincial titular José Domingo Pérez tiene el terreno llano para sustentar, por segunda vez, una prisión preventiva para Keiko Fujimori por el caso Odebrecht

Fuentes del Equipo Especial del caso “Lava Jato” explicaron a Correo que el fallo del TC retrotrae el estado de la investigación al momento de la solicitud que formuló el fiscal provincial titular José Domingo Pérez Gómez de 36 meses ante el Poder Judicial. “Retrotraer las cosas al estado anterior a la emisión de las resoluciones anuladas”, se lee en el tercer ítem de la parte resolutiva del fallo.

Para que ello suceda, el juez competente del caso, Víctor Zúñiga Urday, debe ser notificado de la resolución del Tribunal Constitucional para convocar a una audiencia de prisión preventiva en contra de la lideresa de Fuerza Popular, indicaron las fuentes a este diario.

“El juzgado constitucional tiene que enviar el fallo del TC al juez penal de la causa (Víctor Zúñiga), quien tiene la obligación de convocar a una audiencia de prisión preventiva en el más breve plazo”, señalaron desde el Equipo Especial del caso “Lava Jato”.

Como se recuerda, Zúñiga Urday asumió la competencia en esta investigación desde marzo de este año, luego de que la defensa del ex secretario general de Fuerza Popular, Jaime Yoshiyama, lograra apartar al juez Richard Concepción Carhuancho.

Las fuentes remarcaron que el Poder Judicial debe tener en cuenta la complejidad del caso con la finalidad de dar celeridad a la notificación del fallo y que el juez convoque a la audiencia pública.

“En este momento, contra la investigada Keiko Fujimori no pesa ningún tipo de medida restrictiva. Está en pleno uso de su libertad y puede, si así gusta, irse del país o comunicarse con sus demás coinvestigados. Por eso, resulta necesario que el juez convoque a esa audiencia”, señalaron desde el Ministerio Público.

En efecto, Keiko Fujimori -investigada por recibir presuntos aportes irregulares de Odebrecht para las campañas presidenciales de 2011 y 2016- no tiene ninguna medida como reglas de conducta o impedimento de salida del país.

En pieAsimismo, el fallo del TC no cuestiona los elementos de convicción que presentó el fiscal José Domingo Pérez contra Keiko Fujimori, por lo que en un eventual pedido de prisión preventiva en su contra se usaría ese mismo material probatorio e incluso los nuevos elementos que se han recabado este año, indicaron las fuentes.

Entre el nuevo material probatorio estaría el testimonio de Jorge Yoshiyama, sobrino de Jaime Yoshiyama, quien dijo a la Fiscalía que Keiko Fujimori conocía de los aportes de Odebrecht para su campaña presidencial.

También las declaraciones de los empresarios, como la de Dionisio Romero Paoletti, quien reconoció haber donado 3 de millones 650 mil dólares a Fuerza Popular en el 2011. “El voto en mayoría solo se ha puesto de acuerdo en la liberación de Keiko Fujimori, pero no con cuestionar los elementos de convicción que ha presentado la Fiscalía”, explicaron desde el MP.

No obstante, cuestionaron el sentido del fallo del TC, ya que -a juicio del Ministerio Público- existiría una incongruencia entre la parte resolutiva y los fundamentos de la sentencia. “En toda sentencia tiene que haber coherencia entre los fundamentos y la parte resolutiva”, explicaron.

ExpectativaEn tanto, en su primer día tras ser excarcelada del Penal Anexo de Mujeres en Chorrillos, la lideresa del fujimorismo salió de su residencia en Surco para asistir a un almuerzo familiar en la casa de su madre, Susana Higuchi, en el distrito de San Borja.

En declaraciones a la prensa, la excandidata presidencial agradeció la compañía y el apoyo brindado por Higuchi y sus hermanos Hiro y Sachi Fujimori, quien asumió el rol de “mamá sustituta” para sus hijas Kiara y Kaori durante la huelga de hambre de su esposo Mark Vito.

El ausente en el encuentro fue el excongresista y hermano de Keiko, Kenji, quien ha permanecido en silencio pese a la liberación de la lideresa “naranja”.

“Ayer (viernes) ha sido un día muy emotivo. Sin duda fue larga la espera, pero valió la pena. En el caso de Kenji, yo estoy segura de que más adelante encontraremos el tiempo y el espacio para también conversar y reencontrarnos”, indicó Keiko a su salida de la residencia de su madre en una camioneta gris conducida por su esposo.

La también exparlamentaria aseguró que hoy visitaría a su padre y expresidente Alberto Fujimori, recluido en el penal de Barbadillo.

PanoramaEn ese contexto, analistas políticos consultados por este diario coinciden en señalar que la agrupación Fuerza Popular se muestra debilitada y Keiko Fujimori está casi “obligada” a sumarse a la campaña del 2020. Ello no necesariamente para sumar más votos a los candidatos de su partido, sino como un gesto político de quien asume el liderazgo de una embarcación incluso cuando esta podría encallar.

El comunicador José Carlos Requena consideró que, tras la liberación de Fujimori, “seguramente se abrirá un espacio para la reconciliación entre albertistas y keikistas, dejando de lado a muchos invitados que tuvieron roles importantes”. Uno de esos casos responde al apartamiento de la excongresista Rosa Bartra.

“Existe un aparente ánimo de cohesionar y más bien de algunos integrantes del Parlamento disuelto de ir a otras contiendas. Keiko es todavía considerada la lideresa indiscutible, y va a tener que mezclar cuestiones personales y judiciales con el manejo de un partido que todavía está golpeado por todo lo visto en los últimos tres años”, expresó.

Por su parte, consultado acerca del futuro de Keiko, el también analista político Fernando Rospigliosi sostuvo que la hija de Alberto Fujimori presenta pocas opciones para ganar en las elecciones presidenciales del 2021, pero de no participar en estos comicios -considera- el movimiento naranja podría estar en riesgo de desaparecer.

“Creo que sí debe participar, porque en todo caso será visto por su gente como una muestra de fortaleza. En realidad, a la gente que participa en política no le gusta la debilidad”, señaló.