Lo llamaban “revocador” y durante el proceso electoral que inició en el 2013, para destituir a la entonces alcaldesa Susana Villarán, fue blanco de innumerables condenas y ataques. Seis años después, con la prisión preventiva de Villarán, el sistema judicial parece reivindicarlo, darle la razón. Ahora, Marco Tulio Gutiérrez asegura que le da pena la reclusión de la exburgomaestre, pero asegura que siempre creyó que ella incurrió en la corrupción.

¿Cuáles son sus impresiones sobre esta prisión preventiva para Susana Villarán?

En realidad, de lo que se trata es de que se creen las condiciones para que no se eluda la acción de la justicia. Ahora, en cuanto al tiempo, 18 meses, me imagino que la decisión del juez debe haber estado basada en que este caso ha sido convenientemente investigado y lo que le falta ya no es tanto como falta averiguar en otros casos.

¿Supone que los aportes que recibió son una coima? 

Es evidente, porque ella estaba en el ejercicio del poder. Cuando no se está en el ejercicio del poder, lo que queda es la expectativa posible de que la persona no cumpla con el compromiso de devolver el “favor” (...). La política, la táctica mafiosa de Odebrecht, ha dado lugar a que nadie se salve de la sospecha. ¿El señor (Luis) Castañeda está bajo sospecha? Claro que está bajo sospecha, sería inusual que alguien que ha tenido la oportunidad de adjudicar una concesión no haya recibido ni un real, estaríamos ante una versión canonizable de un “San Lucho”. Lamentablemente, todo lo que ha ocurrido apunta a que todos recibieron dinero, y si todos recibieron dinero, todos deben ser denunciados y sancionados.

Entonces, ¿está de acuerdo con que se haya impuesto prisión preventiva a Villarán? 

Eso es obvio, porque la señora ha tenido una política de entorpecimiento de la labor (de la investigación). En el caso de ella, no queda duda porque lo ha declarado, ella misma ha dicho que es culpable.

¿Considera que el avance de la investigación sobre Villarán es una suerte de reivindicación histórica de la revocatoria que inició?

Más que reivindicación, es la demostración de que los escenarios estaban invertidos. O sea, durante toda la campaña fui insultado de mafioso y de corrupto, sin una prueba, sin ser funcionario.

¿Eso quiere decir que la mafiosa y corrupta es Villarán?

Siempre creí que Villarán es mafiosa y corrupta. Es que sus propias declaraciones la han calificado; el hecho de que ella explique que por enfrentarse a una mafia tuvo que actuar mafiosamente, eso francamente es un contrasentido. No me alegra, no me alegra la prisión de Villarán, no me alegra la prisión de nadie, sin lugar a duda.

De acuerdo con directivos de Odebrecht y OAS, los primeros aportes que recibe Villarán son para poder financiar una campaña en contra de la revocatoria que usted inició. ¿Ella no se vio empujada a pedir estos dineros por un acto suyo?

No porque, en todo caso, aceptar eso hubiese significado aceptar que yo, Marco Tulio Gutiérrez, hubiese tocado puertas para la revocatoria; ni las de mis amigos toqué para la revocatoria, nadie puede decir que alguien me dio un sol para esa campaña. En la campaña, lo que yo ponía fue mi carro, y cuatro amigos me acompañaban con mis cartones del “Sí”. La publicidad televisiva, que apareció en las últimas dos semanas de campaña, bueno, que el Jurado (Nacional de Elecciones) o ahora la Fiscalía pida a los canales de televisión que les diga quién pagó la factura. Yo he dicho en televisión el otro día, que presumo que fue el señor (José) Luna, no puedo estar seguro; Luna públicamente había proclamado su respaldo a la campaña del “Sí”.