La candidata presidencial de Frente Amplio, Verónika Mendoza, rechazó la denuncia sobre la supuesta concesión minera que tenía su padre en una zona arqueológica Piquillacta en el Cusco, producto de una invasión a ese terreno.
Mediante un comunicado publicado en las redes sociales, Mendoza Fisch consideró que esta denuncia “tiene obvios fines electorales y forma parte de la guerra sucia” en su contra que busca detener el incremento de intención de votos hacia su candidatura como viene revelando las últimas encuestas.
La lideresa de Frente Amplio detalló que su padre Marcelino Mendoza, obtuvo mediante resolución directoral 358 autorización para realizar actividades de minería no metálica, en este caso para extraer piedras.
“Posteriormente, el Estado declara que dicha zona será incluida como parte del Parque Arqueológico de Piquillacta. Por ello, el propio Estado emite una nueva resolución directoral 401, dejando sin efecto la anterior y por lo tanto anulando el denuncio minero referido”, indica.
Tras este proceso, la postulante presidencial explica que su padre inició un proceso legal de apelación, el mismo que finalmente es desestimado en última instancia por el Tribunal Constitucional el año 2002, hace 14 años.
“Durante el tiempo en que este yacimiento estuvo en actividad, ello fue absolutamente legal. Nunca se realizó ninguna activa ilegal”, agregó.
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