En verano no solo hay que cuidar la piel de los rayos del sol, sino también el cabello. (Foto: Pixabay)
En verano no solo hay que cuidar la piel de los rayos del sol, sino también el cabello. (Foto: Pixabay)

Salir a las calles este verano no puede ser solo una rutina. Evitar las quemaduras por las altas temperaturas y los índices de radiación ultravioleta es también prevenir la llegada de enfermedades cutáneas que con el correr del tiempo se vuelven irreversibles. Es por tal motivo que, si estás pensando en disfrutar al máximo este época del año, debes tomar en cuenta estos consejos para no resultar sorprendido.

¿CÓMO EVITAR QUEMARSE POR EL SOL?

1. Quizás este consejo ya lo hemos escuchado antes de algún familiar. Y es que no ningún secreto sobre el tema. El uso de protector solar debería ser obligatorio en estos días calurosos. Sin embargo, existe un problema con el momento en el que muchas personas lo usan: horas después de haber estado expuestos al sol. Lo recomendable es que antes de salir de casa hagamos uso del bloqueador, para así no tener contratiempos en el camino.

Si en el transcurso del día te bañas, debes volver a utilizar el bloqueador solar, ya que su anterior uso no surgirá efecto. Es por tal motivo que sería ideal que dicho protector sea fotoestable, a fin de que continúe con su utilidad durante el día bajo circunstancias imprevistas.

Un libro no bastará para evitar quemarse por el calor del verano.
Un libro no bastará para evitar quemarse por el calor del verano.

2. El cielo durante el mediodía y el inicio del atardecer es realmente una obra de arte. Motivo de inspiración de muchos artistas y fotógrafos, pero, ¿es ideal canjear nuestra salud por ver la belleza del cielo? Pues la respuesta es negativa. La mayor probabilidad de quemarse se da justamente en el trance del mediodía y las 2 de la tarde debido a los rayos ultravioleta. Es por eso que exponerse progresivamente en esos minutos es una buena idea.

3. Gran parte de la población se encuentra de vacaciones durante este tiempo y decide disfrutar sus días de ocio haciendo ejercicios. Montar bicicleta, correr por la avenida, nadar en las playas o piscina es casi una rutina. No está nada mal, lo importante y recomendable es que lo hagan durante horas en los que el sol no proyecte un alto índice de radiación ultravioleta. El deporte nunca será parte de las desventajas de la vida.

4. Las lluvias también son parte del verano. En ese sentido, muchos consideran que ello representa estar a salvo de los rayos ultravioleta. Otra vez la respuesta es negativa. Estos son elementos distractores a lo que realmente sucede. Si el día presenta nubosidad, no quiere decir que el sol no esté presente, confiarse sería un error. Así que la protección debe ser permanente.

5. El uso de lentes de sol es importantísimo, como también lo es saber elegir uno. Más allá de lo estético, estos tienen una función específica a favor de nuestros ojos durante el verano. Es por eso que si vas a invertir en unos, tómate el tiempo en elegir uno de acuerdo a tus medidas oculares.

Protectores solares deben ser indicados por especialistas de acuerdo a la piel de cada persona.
Protectores solares deben ser indicados por especialistas de acuerdo a la piel de cada persona.

6. La deshidratación en esta época del año es un pecado mortal. Beber al menos un litro y medio de agua al día puede ayudar a que el cuerpo tenga defensas suficientes para afrontar las altas temperaturas de esta estación.

7. El diablo está presente en los detalles, dicta una frase que cobra vigencia si tomamos en cuenta este consejo. Si notas que una peca o lunar ha cambiado su forma o color, o si tan solo lo sospechas, es necesario que acudas al dermatólogo de tu confianza para descartar cualquier indicio de enfermedad cutánea.

Así que ya sabes: cuidar de tu salud no es nada difícil. Más vale prevenir que lamentar enfermedades crónicas como el cáncer a la piel. Si el verano se disfruta responsablemente, no habrán límites a pasarla bien.

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