Los pequeños adquieren buenos hábitos en el día a día, con persistencia, voluntad y, por supuesto, con la necesaria disciplina que les deben imponer los padres. Precisamente, en los dientes se puede percibir qué tanta responsabilidad y cuidado van teniendo los chicos y adolescentes.

“Él niño debe tomarlo como algo divertido, para que se haga costumbre. Y sobre todo, debe mirar cepillarse a su papá, porque el niño suele imitar lo que hace el padre”, dice el odontólogo Guillermo Ríos, odontólogo de la estética dental Ríos.

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Primero, cuando se producen las caries, el diente sufre una cavidad en la capa de esmalte. Si no se trata, se hace una nueva cavidad en la dentina, un tejido suave y sensitivo que, de ser afectado, causa dolor. Después, si se sigue descuidando, la carie llega hasta el nervio y la única alternativa es la endodoncia, que genera un gasto, infección y más dolor. Y si te tienen que sacar el diente, por lo general habrán malas posiciones.

El doctor advierte que las caries pueden aparecer durante nuestra etapa de sueño nocturno si es que no se han lavado los dientes. “(Tanto niños como adultos) se van a dormir sin cepillarse los dientes; y la proliferación y el desarrollo de los microorganismos es mayor en la noche que durante el día porque estás con la boca cerrada”, sostiene.

Para prevenir estos males, las indicaciones son claras. El odontólogo aclara que no solo se debe lavar los dientes tres veces al días después del desayuno, almuerzo y cena. Para la correcta higiene también es necesario el uso de hilo dental, por lo menos una vez al día, en la noche. Y también sugiere usar un enjuagatorio bucal algunos días a la semana.

¿Qué alimentos o dulces generan más caries?El doctor Ríos indica que los azúcares y carbohidratos son los alimentos preferidos de los microorganismos que producen las caries y las enfermedades de las encías, como la gingibitis y periodontitis.

“El niño come una galleta, un chocolate, se pega en la superficie de los dientes, los microorganismos ven estos alimentos y producen unos gases que terminan produciendo cavidad en el diente (carie) o inflamación gengibal”, advierte.

“Los toffes, las frunas producen mayor carie, porque son dulces pegajosos que se meten entre los dientes y atacan la primera capa que es el esmalte (tejido más duro del diente)”, agrega.

Ante estos riesgos, Ríos insta a los padres a poner énfasis en la higiene de la zona donde se ha abusado del diente para comer. Además, precisa que el cepillo se debe cambiar cada dos meses.

¿Cada cuánto tiempo debemos hacer los chequeos de nuestros dientes?El doctor Ríos aclara que, tanto para niños como para adultos, los chequeos deben ser frecuentes. Para el caso de las personas que comen azúcares en exceso, sugiere que acudan al odontólogo cada cuatro meses; y para aquellos que llevan una dieta saludable - con frutas o verduras - recomienda citas cada seis meses.

Para los adultos que utilizan prótesis, recomienda que deben llevarla cada cuatro meses para su respectivo mantenimiento. Además, indica que se debe cepilla la prótesis y en la noche debe permanecer remojada en agua.

Aclara, además, que los mondadientes no son una alternativa confiable y por lo tanto no deben usarse.

¿Cómo cuidar los dientes de tus hijos de 1 o 2 años?Guillermo Ríos recomienda a los padres que sus niños deben acudir desde el nacimiento para ser precavidos y notar si sus dientes están saliendo correctamente y sin inflamación. Además, indica que se debe limpiar la boca de los bebés pese a que no tienen dientes.

“Las encías y los carrillos, que es la parte de adentro de los cachetes, se llenan de leche cuando el niño come, entonces si eso no lo limpia, cuando salgan los dientes va a haber más tendencia a hacer caries”, comenta.

Ante este riesgo, brinda una técnica para la limpieza de sus bebés. “Se deben poner una gasa en el dedo con agua oxigenada y un poco de agua, y después de que el bebé amamante o tome su fórmula, hay que limpiarle toda la zona de los carrillos para que eso esté limpio. Con eso mejoras la cantidad de microorganismos en la boca. Desde allí ya tienes que ir al odontólogo”, explica.

En el caso de los niños de dos años - a los que ya les salieron sus dientes de leche -, Ríos indica que se debe limpiar con fluor.

“De esa manera natural el diente se remineraliza y crea una barrera protectora que evitará que los ácidos que producen las caries o gingibitis entren con fuerza”, dice.

Dientes apiñados o con bracketsEl odontólogo recomienda que aquellos chicos con “dientes apiñados o amontonados” deben obligatoriamente usar hilo dental, debido a que la higiene se torna dificultosa por la mala posición.

Y para los niños o adolescentes con brackets, señala que la higiene debe ser más exhaustiva porque “es un aparato que ya tienes ahí”.

“No solo se va pegar el toffes, la galleta, el dulce en el diente, sino también alrededor del bracket, y si no se hace un correcto cepillado, habrá una inflamación de las encías y puede producir una gingibitis. Y allí debemos hacerle un corte en las encías para que vuelva a su tamaño normal porque está inflamada”, dice el doctor Ríos.

Además, recalca que deben comer distinto. “No puede comer una manzana o una hamburguesa desgarrándola”.

Alternativas naturales para limpiar los dientesSi un día comiste o almorzaste y no trajiste tu cepillo, el odontólogo recomienda comer una manzana; al morderla barren las bacterias que salen por la comida. Debes ingerirla hasta veinte minutos después de la comida, pues en ese tiempo comienza a salir el sarro.

El té verde - y no el normal - es otra alternativa para limpiar los dientes.

Cuidado con las pastas blanqueadorasLas pastas con bicarbonato, que se utilizan para blanquear los dientes, no deben utilizarse en exceso, porque desgastan la superficie del esmalte.

“Hay que tener cuidado con esas pastas blanqueadores, sobre todo en jóvenes, porque su esmalte hasta los 18 años es inmaduro, todavía no ha terminado de calcificarse. Y si te cepillas con esas pastas, vas a desgastar un esmalte que no ha terminado de calcificar.

El doctor exhorta a los padres a que no pidan a para sus adolescentes de 13 o 14 años este tipo de blanqueamientos. Sí lo sugiere para aquellos que ya han cumplido 21 o 22.