La activista nicaragüense Bianca Jagger consideró hoy que la organización Greenpeace cometió "un error grave" al ingresar a las líneas de Nasca para hacer una actividad ambientalista que ha generado indignación en Perú.
"Fue un error grave. No fue de mala fe, sino de ignorancia", consideró Jagger al comentar el tema en la emisora RPP Noticias.
La activista, exesposa de Mick Jagger, consideró "terrible lo que ha ocurrido", ya que las autoridades peruanas señalan que se ha causado daños irreparables en la zona.
Jagger, quien es embajadora de buena voluntad del Consejo Europeo, participa en Lima en la vigésima cumbre del cambio climático de las Naciones Unidas (COP20).
La polémica por la acción de Greenpeace llevó al presidente de Perú, Ollanta Humala, a criticar hoy a la organización ambientalista por haber faltado el respeto al patrimonio cultural y a las leyes peruanas.
Los integrantes de la organización formaron el lunes pasado con letras de color amarillo recortadas previamente un mensaje para tomar conciencia sobre el cambio climático al costado de la figura del Colibrí, uno de los geoglifos más representativos de las líneas de Nazca, que por su tamaño solo se puede apreciar desde el aire.
Según Greenpeace, en la acción intervinieron activistas de Alemania, Argentina, Austria, Brasil, Chile, España e Italia.
La fiscal Velia Begazo, de la Segunda Fiscalía Provincial de Nazca, abrió una investigación preliminar del caso tras recibir una denuncia presentada por el Ministerio de Cultura peruano.
Según la información, Begazo inspeccionó la zona colindante a la figura arqueológica del Colibrí, acompañada por policías y expertos de Cultura, donde "se detectaron daños irreparables, en un área de 1.600 metros cuadrados."
La investigación preliminar busca determinar la identidad de los activistas de Greenpeace que ingresaron en la zona intangible de Nazca, declarada patrimonio cultural de la humanidad.
Los implicados, que al parecer son doce personas, "habrían incurrido en el delito contra el patrimonio cultural" que contempla penas de hasta 8 años de cárcel.
Tras la ola de críticas que recibió por su ingreso a la zona intangible, Greenpeace emitió un comunicado en el que ofreció disculpas "sin reserva alguna" por su acción, aunque la restringió a "cualquier ofensa moral que se haya causado al pueblo peruano".
La organización aseguró que se reunió con representantes del Ministerio de Cultura para ofrecer sus "más sinceras disculpas a la autoridad competente" y aseguró que da "la bienvenida a una investigación independiente de las consecuencias" de su actividad.
Sin embargo, el viceministro de Cultura de Perú, Luis Castillo, afirmó que las autoridades peruanas han rechazado las disculpas ofrecidas por Greenpeace porque la organización no admite el daño causado al patrimonio histórico y cultural del país.