Tras cumplir siete años en la cárcel por asesinar a su exnovia y darle su cuerpo a los perros para que se lo comieran, el arquero brasileño Bruno Fernandes de Souza regresará al fútbol profesional con el Boa Esporte por los próximos dos años, lo que ha generado polémica en Brasil.
Tras conocerse la noticia, aficionados y patrocinadores del equipo brasileño de segunda división protestaron en las redes sociales y en medios locales, según informó CNN.
Fernandes, de 32 años, jugó antes para el club Flamengo, uno de los más importantes de Brasil. Y además era favorito para integrar la selección de su país.
El jugador fue arrestado en 2010 y luego tres años de juicio fue declarado culpable de homicidio, secuestro y de esconder el cuerpo de su exnovia Eliza Samudio. Fue condenado a 22 años de cárcel.
"Al poco de ingresar en la cárcel, el futbolista presentó un recurso contra la condena y el retraso de la justicia, que sigue sin resolver el caso, llevó a un juez a ordenar su puesta en libertad provisional a la espera de la apelación", informó BBC.