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La Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil) confirmó que 81 personas viajaban en el avión que transportaba al equipo de fútbol brasileño Chapecoense que se estrelló cuando se dirigía al aeropuerto José María Córdoba de Medellín.
Según informan desde Colombia, el piloto de la nave, el capitán boliviano Miguel Quiroga, atinó a vaciar el combustible antes que el avión se estrelle, de esta manera evitó que se produzca una explosión que pudo empeorar la situación y disminuir la posibilidades de que existan sobrevivientes.
El siniestro se produjo en inmediaciones del cerro El Gordo, en jurisdicción del municipio de La Unión, en el departamento de Antioquia, cercano a Rionegro, donde está ubicado el aeropuerto José María Córdoba.
Quiroga, que pilotaba el avión de Lamia que se estrelló la aeronave causando la muerte de 75 personas, entre ellas jugadores del club brasileño Chapecoense, era el yerno del exsenador opositor boliviano Roger Pinto, que está asilado en Brasil desde 2013.
Quiroga era un exoficial de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y estaba casado con una de las hijas del exsenador Pinto, cuya familia "se encuentra destrozada por la noticia", dijo hoy a Efe Marco Julio, una persona allegada al dirigente político que vive en Brasilia y con quien conversó telefónicamente esta mañana.
Según la fuente, Quiroga tuvo tres hijos con Daniela Pinto, un varón de 13 años, una niña de 9 y otra de tres meses.
La familia Pinto vive en Brasil desde que el político salió de Bolivia en 2013 afirmando que era objeto de persecución política de parte del presidente Evo Morales por haber denunciado supuestos actos de corrupción en la Administración del mandatario.
Pinto escapó a Brasil en agosto de 2013 tras un año y medio refugiado en la embajada brasileña en La Paz y lo logró con el apoyo de miembros de esa legación, que le ayudaron a alcanzar la frontera.
La operación para que Pintó cruce el limite territorial sin la aprobación del Gobierno boliviano le costó el cargo al entonces canciller de Brasil, Antonio Patriota.
"Pinto dice que la vida la ha vuelto a golpear, está destruido porque consideraba a Micky como un hijo propio", dijo Marco Julio.
El exsenador boliviano trabaja en Brasilia como asesor en una comisión parlamentaria brasileña y también como piloto de helicópteros, según la fuente. EFE
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