“El reto es articular la minería con la economía y el desarrollo del país”
“El reto es articular la minería con la economía y el desarrollo del país”

Mejorar los mecanismos de articulación del sector minero con los demás sectores productivos, desarrollo y sociales del país, es el desafío urgente de las empresas y el Estado con miras al 2021.

A juicio del presidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), Víctor Gobitz, los retos y posibilidades del sector pasan ineludiblemente por este considerando, a fin de determinar cómo los proyectos y la producción minera benefician a las comunidades, a las localidades donde se desarrolla con la generación de empleos de calidad, impuestos y servicios.

RETOS. Durante la conferencia inaugural de Perumin 33, efectuada ayer en el complejo cultura de la UNSA, el especialista precisó que está también la necesidad de mejorar la infraestructura portuaria (46% de las exportaciones mineras salen por el sur), la conectividad vial, la generación de fuentes de energía competitivas (gas virtual y el nodo energético) además de la participación del sector en el mejoramiento de la educación escolar y superior de las regiones en las que se desenvuelve.

“Lograr que los puertos estén interconectados es un gran desafío, sumado al mejoramiento de la conectividad vial, para lo cual necesitamos por lo menos 2 mil millones de dólares, pero el eslabón clave es el capital humano que tiene que ser parte de este modelo para que el país logre competitividad también por la calidad de las personas”, sostuvo, argumentando que es tiempo de dejar de ver a la minería como una actividad individual, sino de gran significado para el desarrollo de un país.

Para ejemplificar los efectos de la minería, precisó que entre el 2001 y el 2016 la región Arequipa recibió aproximadamente 5 mil 200 millones de soles en transferencias por canon minero. 129 millones se dirigieron a la Universidad Nacional de San Agustín, mil 113 millones al Gobierno Regional y 3 mil 950 a los gobiernos locales. Además, en los últimos 20 años, la pobreza en la región Arequipa se redujo en más de 30%.

En otras regiones del sur, la contribución de la actividad minera al desarrollo ha sido también significativa al reducir la pobreza a un 7% aproximadamente, en las regiones que concentran el mayor potencial de inversión minera, tales como Arequipa ($ 5019 millones), Ica ($3040 millones) Moquegua ($ 6175 millones) y Apurímac (9713 millones), seguido de regiones como Tacna, Cusco y Puno que concentran inversiones por $ 3300 millones. Gobitz destacó que, con el desarrollo de los proyectos en cartera, la pobreza podría bajar a nivel nacional de 21 a 5% al 2021.