​Intensas lluvias y huaicos castigan a la región Ayacucho 

Las precipitaciones pluviales han iniciado este año de la peor manera en diversas provincias y distritos de la región Ayacucho, porque han generando graves consecuencias en viviendas, animales, campos de cultivo e infraestructuras.

Según el registro del Centro de Operaciones de Emergencias Regional (COER) de la subgerencia de Defensa Civil, a la fecha ocurrieron diez eventos adversos de consideración provocados por intensas lluvias, deslizamientos, huaicos y granizadas.

Las localidades que más daños sufrieron a raíz del mal tiempo fueron Ccarhuacclicapa y Barriopampa de los distritos de Paras (Cangallo) y Querobamba (Sucre), respectivamente, donde perdieron la vida 268 animales, 26 viviendas afectadas y más de 96 personas afectadas.

Asimismo, la última emergencia que ocurrió fue en la localidad de Pinahua, ubicado dentro del distrito de Chunpi, provincia de Parinacochas. Aquí las intensas lluvias estuvieron acompañadas por una granizada. Ambos duraron más de una hora.

En este caso, 3 viviendas quedaron inhabitables, 10 hectáreas de cultivo totalmente dañados y 30 personas afectadas, quienes pidieron apoyo a las autoridades, como Defensa Civil y esta institución decidió asistirlos con 100 frazadas y víveres.

Las viviendas no son las únicas infraestructuras que se perjudican en esta temporada, a esto se suman las vías de comunicación.

Por ejemplo la carretera que une a las comunidades de Colcabamba y Aulla en el distrito de Pararca (Paucar del Sara Sara) se vio afectado tras la activación de la quebrada de Wishuaycho y Aullahuaycco.

PREOCUPA. Lo preocupante es que esta situación podría continuar en los siguientes días, ya que según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología, se presentarán lluvias de moderada a fuerte intensidad, acompañadas de descargas eléctricas.

Al respecto el subgerente de defensa Civil, Carlos La Madrid, exhortó tomar medidas de preparación y precaución en caso de precipitaciones, como usar ropa de abrigo, alejarse de los cauces de ríos y en caso de tormentas eléctricas refugiarse bajo techo.

“Definitivamente no vamos a parar el efecto que pueda producir una lluvia, pero lo que sí podemos hacer con las recomendaciones es minimizar el problema en cuanto a la afectación de las personas”, mencionó.

El funcionario agregó que se debe proteger y limpiar periódicamente el techo de las viviendas para evitar que se acumule agua. Finalmente en vientos fuertes permanecer dentro de la casa y alejarse de equipos eléctricos enchufados y materiales punzo cortantes. Tener cuidado al utilizar lámparas o velas, porque la caída de estos podrían ocasionar un incendio.