Al promediar las 5:30 de la tarde los restos del suboficial de tercera PNP Denis Chávez Palacios, llegaron hasta la provincia de Chupaca, en la región Junín. El  hogar en el que todos los años bailaba shapish, pero este año no pudo participar por su trabajo en la selva.

Su mejor amigo, Héctor Ponce Vicente dijo que desde niños tenían el sueño de ser policías juntos y brindar apoyo a la ciudadanía.

Su madre Soledad Palacios Inga, lo recuerda como un hijo alegre.  “Era bien dedicado a su trabajo un padre muy responsable y le gustaba mucho su baile de los shapish programaba sus vacaciones para mayo”, señaló.

Dijo que se comunicó con Dennys un día antes de lo ocurrido. “Mami te llamo mañana, te quiero mucho”, le dijo, pero no pudo cumplir con su palabra porque dos delincuentes le quitaron la vida a tiros.

“En vez que él me entierre a mi, ahora yo tengo que enterrar a mi hijo”, lamenta.  Al lado una inconsolable anciana, la abuela del suboficial, solo llora la muerte  de su nieto.

El entierro ha sido programado para mañana domingo y lo acompañarán, sus amigos al ritmo de la danza guerrera que interpretaba todos los años.