Paralización de Chavimochic genera millones en pérdidas
Paralización de Chavimochic genera millones en pérdidas

Desde noviembre de 2016 las obras hidráulicas de la fase inicial de la III Etapa del Proyecto Especial (Pech) están totalmente paralizadas. Pero, según ha señalado la empresa concesionaria Odebrecht-Graña Montero, a través de un comunicado que emitió en febrero de este año, el Gobierno Regional de La Libertad llevaba más de 31 meses de retraso en cumplir con sus obligaciones de entregar los terrenos saneados para la construcción del canal madre.

Ahora bien, el aplazamiento de las obras y luego la paralización total de las mismas en la construcción de la presa Palo Redondo, en la provincia de Virú, como consecuencia de que la empresa Odebrecht se vio envuelta en una grave denuncia por actos de corrupción, ha generado una serie de implicancias negativas que, obviamente, perjudican en mayor medida al Gobierno Regional de La Libertad.

GASTOS GENERALES. Al margen de la problemática social que se ha generado por el despido de al menos 1, 800 trabajadores, muchos de ellos con liquidaciones pendientes, está también el riesgo de inestabilidad de la presa Palo Redondo que está expuesta a fenómenos climatológicos y al deterioro de la maquinaria del Pech que aún permanece en el campamento en el sector de Tanguche.

Pero, hay dos problemas más que tiene que afrontar el Gobierno Regional de La Libertad y que están directamente relacionados a una afectación económica.

GOLPE A LOS BOLSILLOS. Primero, que cada mes de retraso que tienen las obras de la III Etapa del Pech crecen los intereses del préstamo de los 350 millones de dólares que se hizo ante la Corporación Andina de Fomento (CAF), dinero que tienen que pagar todos los liberteños.

Segundo, a mayor tiempo de la ejecución de la obra se tiene un impacto aproximado de 4.2 millones de dólares mensuales por concepto de mayores gastos generales. Esto último lo precisa la empresa concesionaria.

MINIMIZA. Dante Chávez Abanto, consejero regional por la provincia de Trujillo, ha tratado de poner paños fríos a la situación de los intereses que están corriendo por el préstamo a la CAF, señalando que los montos que cobra esta entidad son mínimos.

No obstante, del lado de la concesionaria la realidad es muy distinta, toda vez que trascendió que por todos estos aplazamientos y paralización de las obras se había supuestamente solicitado 100 millones de dólares de sobrecostos al Gobierno Regional de La Libertad.

Empero, en otro comunicado, esto fue desmentido por Odebrecht. Sin embargo, en ese mismo documento, fueron bastante claros al indicar que el mismo gobierno regional ha aceptado que la demora de más de tres años en la entrega de los terrenos genera gastos generales, para lo cual un perito de la Cámara de Comercio Internacional determinará si habría generado un daño a la concesionaria.

NO FIRMA LA ADENDA. Es importante indicar que antes de llegar a este último punto de proponer que un perito internacional calcule si hubo o no afectación económica a la concesionaria, esta y el Gobierno Regional de La Libertad acordaron formular una segunda adenda al contrato de concesión que diera al Pech 15 meses más, hasta diciembre de 2017, para entregar los 128 kilómetros de terrenos liberados para la construcción del canal madre.

Pero esta adenda no se firmó debido al escándalo de corrupción en el que estaba envuelta la empresa Odebrecht por el presunto cobro de coimas para ganar las licitaciones en las obras en diferentes países.

REUNIÓN INMEDIATA. Ante este contexto, la congresista liberteña por Alianza Para el Progreso (APP) Gloria Montenegro Figueroa informó ayer que la siguiente semana estará en Trujillo para sostener una reunión con el gerente general del Pech, Miguel Chávez Castro, y el gobernador regional de La Libertad, Luis Valdez Farías.

“Les voy a plantear y sugerir que se toque este tema de forma inmediata con el presidente del Consejo de Ministros, Fernando Zavala, porque es vital hallar una mejor salida teniendo en cuenta que ahora no se puede hacer ningún tipo de contrato ni adendas con Odebrecht o cualquier empresa relacionada a ella; por lo tanto hay que encontrar una medida viable de transferencia de todo lo actuado para que otra empresa la termine y eso tiene que ser ya”, enfatizó.

COMPROMISO. La legisladora se comprometió a que a su retorno a Lima personalmente tocará el tema de la continuidad de la III Etapa del Pech con Fernando Zavala. “Voy a preguntarle qué va a pasar con todos estos proyectos grandes que estuvieron involucrados con Odebrecht y que ahora no se puede continuar. Ahora no hay que olvidar que el Pech tiene maquinaria que está parada y se va a deteriorar. Otra cosa que me preocupa son los cientos de trabajadores que están pendientes de pago, sus liquidaciones y sus indemnizaciones; todo esto está en la agenda que quiero tratar y creo que este tiene que hacerse de forma inmediata”, recalcó.

UNA REINGENIERÍA. En esa misma línea, el exgerente general del Pech, Edilberto Ñique Alarcón, recomendó que ante esta situación en la que está envuelta la gestión regional no solo por la paralización de las obras de la III etapa, sino también por los escándalos de “trabajadores fantasmas” en el proyecto, es oportuno realizar una reingeniería administrativa.

“Además se debe hacer una revisión del proyecto para poder darle continuidad. En un escenario de corrupción es conveniente hacer un análisis de los contratos para, de acuerdo a eso, ver la forma de relanzar el proyecto, y eso tiene que hacerse de manera urgente, porque acá hay que traer a colación que el Gobierno Central le ha dado un ultimátun al Gobierno Regional de Áncash para que solucione los problemas del proyecto Chinecas, ya de lo contrario el Ejecutivo asumiría el control y eso podría ocurrir en Chavimochic, porque se ve que no se puede gerenciar bien”, señaló.

Ñique fue claro al asegurar que la continuidad de la III Etapa del Pech no se solucionará con un opinión política del gobernador Luis Valdez, ni mucho menos con la del gerente del Pech, Miguel Chávez.

“Acá lo que falta son decisiones políticas serías y técnicamente fundamentadas. Esto no puede quedar paralizado porque son miles de dólares que se están perdiendo cada día que esta obra está detenida”, resaltó.

¿EL CONSEJO DIRECTIVO?. Asimismo, comentó que este es un tema muy técnico y no político, por eso es necesario que el Consejo Directivo del Pech se pronuncie. “El Consejo Directivo está en palco observando y no dice nada ¿no? Son ellos los que tienen que analizar este tema y establecer las medidas que debe ejecutar el gerente. Es más, deberían ver la posibilidad de contratar los servicios de asesores de alto nivel que puedan plantear soluciones viables para destrabar el proyecto, sino seguiremos en la mediocridad”, advirtió.