Pablo Alborán: “Quiero que mi paso por la música dure y vivir de ella”

Con sus baladas, en las que mezcla pop y flamenco, Pablo Alborán ha logrado conquistar al respetable desde que decidió subir sus producciones a YouTube, cansado de esperar a que las disqueras se animen a lanzar su primer álbum.

El malagueño de 25 años debutó en el 2011 con un disco homónimo y desde entonces lleva ocho nominaciones a los Grammy Latinos, sin contar las Antorchas y Gaviotas de Oro y Plata que ganó en el Festival de Viña del Mar en 2013, así como los diversos premios que ha logrado obtener en su corta carrera, Alborán visitará por primera vez nuestro país para ofrecer un concierto el próximo 7 de marzo en el auditorio del Pentagonito.

El intérprete de éxitos como Solamente tú, Te he echado de menos y Por fin conversó vía telefónica con Correo para hablarnos de su gira Terral 2015, de la música peruana y manifestarnos su más ansiado deseo: hacer que su paso por la música dure y vivir de ella.

¿Vienes por primera vez a Perú?

Sí, es la primera vez que voy a Perú y estoy muy entusiasmado.

¿Cuáles son tus expectativas con respeto al primer concierto que vas a ofrecer en Lima?

La expectativa es muy grande, queremos que la gente disfrute el concierto. Ahora estamos con los ensayos. Vamos a ir América Latina, España, Portugal y Europa. La gente se va a poner a bailar. El concierto también tiene su parte romántica, tiene balada, y visualmente vamos a llevar la misma gira. La idea es que la gente disfrute y se olvide de sus problemas.

¿Cuál es la característica de tu música y cuáles son los temas que te interesan abordar en tus canciones?

Mi música es orgánica, tiene mucha influencia latina. En mis canciones hablo del amor, del presente, del futuro, de las cosas que quiero, de lo que me está pasando, de lo que le pasa a cualquier ciudadano de a pie; escribo de lo que veo, de lo que me gusta y de lo que no me gusta.

¿Qué has podido conocer de la música peruana?

Tengo muchas referencias de los clásicos, del folclore peruano, de la música tradicional. También he escuchado bastante a Eva Ayllón, una mujer que tiene mucha fuerza vocal; Susana Baca y su música afro, y luego a Gian Marco (Zignago) por el Grammy Latino. Me da mucho gusto porque es un gran compositor.

¿Cuáles son los grandes momentos que has vivido hasta hoy?

Guau. Hay todo tipo de cosas. Lo más emocionante fue cantar ante 70 mil personas en un concierto netamente íntimo, de lo más puro. Fue un sueño. Lo que transmite ese momento es inigualable. También me emociona la creación, los discos que se trabajan, la evolución de mis canciones, etc. En este último disco (Terral), por ejemplo, me emocionó poder involucrarme a nivel producción. Ese ha sido un momento básico porque me he sentido libre.

Cantar con Miguel Bosé o Joan Manuel Serrat también habrá sido un privilegio...

Sí, con Serrat ha sido un sueño, hacía años que lo había escuchado. Es emocionante que ellos quieran cantar contigo, cantar en sus conciertos fue un privilegio. Hay una gran amistad entre nosotros. De algún modo ellos se convierten en tus padrinos, te dan su bendición.

¿Qué experiencia o enseñanza te dejó compartir con ellos?

Con ellos me di cuenta de que la sencillez mueve montañas. Serrat, un tipo amable, simpático, gracioso, te deja experimentar artísticamente; y Miguel Bosé es un artista muy disciplinado y siempre busca renovar su música.

Tú aún eres un cantante joven en el terreno musical, ¿cuáles son tus aspiraciones musicales como artista, cuáles son tus metas?

Primero, ir paso a paso, tenemos una gran gira. Mi objetivo es que la gente se sorprenda y luego yo espero vivir de la música, es una suerte poder hacerlo, y lo único que quiero es que esto dure, que yo pueda seguir aprendiendo y componiendo.

¿Es cierto que empezaste por las redes sociales?

Yo preparé un disco, pero los productores no me decían cuándo iba a salir. Fue entonces que subí algunas canciones a YouTube para que la gente viera lo que yo estaba haciendo y los conciertos que daba; les gustó. Luego, las compañías se animaron a lanzar mi disco. Fue como una bola de nieve, en realidad fue maravilloso.