La presidenta argentina Cristina Kirchner dijo este martes que sectores financieros, industriales y políticos internos y externos intentan acabar con su gobierno e incluso que podrían atentar contra su vida.
"Quieren voltear al gobierno con ayuda extranjera. Y si me pasa algo, después de las amenazas recibidas, no miren hacia Oriente, miren hacia el Norte (Estados Unidos)", declaró en un enérgico discurso en la Casa de Gobierno.
Kirchner denunció en su reciente visita al Papa Francisco en Roma que policías le advirtieron de supuestas amenazas de muerte de activistas del Estado Islámico (ISIS), pero ahora corrigió el origen de la intimidación y dijo que viene "del norte", con "un ataque a la soberanía argentina".
"Después de ver las cosas que se están haciendo desde representaciones diplomáticas (denunciar inseguridad en Argentina), que no vengan a crearnos una historieta de que el ISIS me está buscando para matarme", sostuvo.
Al salir después a un patio interno de la Casa Rosada, le dijo a sus partidarios que "redoblen los esfuerzos de unidad y militancia" en defensa del gobierno.
"Pero no vamos a echar a nadie del país", subrayó en relación a los diplomáticos norteamericanos.
Kirchner dijo que el comunicado de Washington sobre una Argentina insegura "es una provocación". (AFP)