En su primer discurso oficial como presidente de Cuba, el recientemente electo Miguel Díaz-Canel ratificó que tiene como principal meta dar continuidad a la Revolución iniciada en ese país el 1 de enero de 1959.
Asimismo, desde el Palacio de Convenciones de La Habana, se comprometió a seguir con la actualización del modelo económico iniciada por su antecesor Raúl Castro.
"El mandato dado por el pueblo a esta legislatura es dar continuidad a la revolución cubana en un momento histórico crucial, que estará marcado por todo lo que debemos avanzar en la actualización del modelo económico", dijo Díaz-Canel ante la Asamblea Nacional.
El nuevo gobernante afirmó, además, que asume "esta responsabilidad con la convicción de que cada cubano, desde la posición que ocupemos, seremos fieles al ejemplo del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, y del exmandatario Raúl Castro.