Miraflores tiene 5000 metros frente al mar. Usamos “su” malecón para caminar, pasear mascotas, correr y, sobre todo, admiramos (y envidiamos) su limpieza, orden y la facilidad con la que convivimos caminantes, gente almorzando, otra leyendo bajo un árbol, chicos malabaristas y los niños en la pista de skate. El malecón es lugar de encuentro de gente de toda la ciudad. Se puede hacer deporte, tomarse un café, ir a Larcomar a comprar o, simplemente, mirar el mar.

En San Isidro tenemos 800 metros de terreno colindantes con el mar. Allí conviven un estadio municipal, una posta, el Mercado de Productores, los bomberos y el estacionamiento del mercado. Hay planes para hacer algo útil y bonito para los vecinos. En Productores se quiere hacer pequeños restaurantes, además mejorar el estadio y convertirlo en un club para que los sanisidrinos hagamos deporte en familia.

Desafortunadamente, los Panamericanos parecerían querer malograrlo todo y, sin respetar a los vecinos, se habría decidido hacer en la zona aledaña del Mercado de Productores un estadio para 5600 personas donde habrá competencias de gimnasia y vóley durante los Panamericanos, gastando ¡S/650 millones! (https://youtu.be/9oc0MtfrV0U).

¿Quién mantendrá esas instalaciones? ¿Cuánto costarán? ¿Harán conciertos cuando no haya con qué pagar las instalaciones? ¿Podrá la avenida Del Ejército soportar el tráfico que ocasionaran esas instalaciones y las nuevas del cuartel cercano?

Los vecinos tenemos derecho a pedir que no nos dejen con un elefante blanco que impedirá el desarrollo del distrito frente al mar donde podríamos tener un lugar de encuentro como Miraflores.

El alcalde Velarde tiene que apoyar a sus vecinos protegiendo áreas irreemplazables en el distrito. Aún podemos hacer el polideportivo en otro lugar.