Brangelina

La separación de Brad Pitt y Angelina Jolie sigue siendo uno de los temas más comentados a nivel global. Hasta el Dalai Lama se ha pronunciado indicando que le apena mucho la situación.

Una pareja exitosa y glamorosa y un hogar soñador puede pasar por problemas, pero la envidia de la gente hace que muchas veces se construyan una serie de historias y chismes alrededor de una separación. Las habladurías de quienes tienen una vida menos interesante es lo que alimenta su envidia, morbo y frustración.

Para una pareja famosa y mediática es inevitable que se hable de ella, para bien o para mal, y dependerá solamente de los dos si se cuidan y protegen a su familia frente a los ataques de quienes los envidian.

La prensa sensacionalista ha hablado de consumo de drogas por parte del actor, conatos de violencia doméstica, supuestas infidelidades y hasta falta de destreza para educar a los hijos.

Ian Halperin, biógrafo de celebridades, contó que uno de los motivos de la separación sería el deseo de Angelina de incursionar en actividades políticas y humanitarias, siguiendo el ejemplo de la princesa Diana de Gales y buscando emular la historia de Grace Kelly. Halperin ha afirmado que su plan incluye mudarse con sus hijos al Reino Unido y hasta casarse con un miembro de la Familia Real, estando en su mira el príncipe Andrés, duque de York.

Chismes y especulaciones sobre una de las más bonitas familias, para la que Brad Pitt ha pedido espacio y respeto, fundamentalmente porque lo que más importa es el bienestar de los niños.