Centralicemos la justicia
Centralicemos la justicia

El último fin de semana fuimos testigos de la llegada a Lima de una banda de extorsionadores y asesinos que operaban en el norte del país, y es digno de destacar que en medio del caos y la preocupación que genera la inseguridad en las calles, se está haciendo algo bien al traer a Lima a los miembros de las grandes bandas de provincias, a fin de que sean juzgados acá y no en sus jurisdicciones, donde jueces y fiscales son demasiado "benevolentes" por razones que tendrán que explicar.

Se hizo con la banda de "Viejo Paco", de Chiclayo; luego con "La Gran Cruz del Norte", de Piura; y el último fin de semana con gente de "Los pájaros" y "Los 80", de Trujillo. A estos se les intervino tras un trabajo de inteligencia y de inmediato se les trajo a Lima, ya que es casi seguro que si van ante los fiscales de sus regiones, en pocas horas podrían ganar la calle "por falta de pruebas" o con el beneficio de afrontar sus procesos en libertad, como si no fueran un peligro.

Para nadie es un secreto que si la Policía trabaja bien en la lucha contra el hampa, en seguida todo el esfuerzo se va al agua cuando los detenidos llegan ante el Ministerio Público y de inmediato son liberados. He sido director de Correo en el norte y me he dado con la sorpresa de que tras su espectacular captura con pistolas, granadas y lista de extorsionados, los hampones se aparecían en mi oficina con su abogado pidiendo "rectificación", porque ya estaban libres por falta de pruebas.

Algo así, por ejemplo, podría aplicarse ante lo que sucede en Áncash, pues si de verdad se quiere sancionar a los culpables de corrupción y asesinato, sería absurdo creer que los fiscales y jueces de esa región, así como los policías que hacen los atestados, van a aplicar justicia como debe ser. Recordemos que hay varios magistrados "becados" por el presidente regional César Álvarez. Así que bueno sería ver que esta gente sea despachada a Lima como "Viejo Paco" o "Los Pájaros".

Si la justicia no funciona en las regiones por diferentes razones que en su momento deberán aclararse, para eso están los aviones cargueros Antonov de la Policía, donde se puede trasladar a todos los miembros de bandas a Lima, a fin de que se les aplique la ley sin temores y no vivamos en el reino de la impunidad que tanto indigna a los peruanos, cansados de que no haya castigo.