Háganle una rueda a Juana, porque ya empezó a bailar. Es cubana, de allá donde Vladimir Cerrón, el dueño del partido que pone al presidente, estudió medicina y se formó ideológicamente. En buena hora que Cuba nuevamente despierte, cansada de 60 años de comunismo y dictadura. Porque el comunismo sin dictadura no existe.

Es una ideología de laboratorio, que no responde a la naturaleza del hombre, por eso siempre será una utopía. Ni en el gobierno revolucionario de las FF.AA. del dictador Juan Velasco Alvarado pudo imponer el comunismo, en más de una década, a punta de botas y fusiles. Porque en el Perú somos tan diversos que la uniformidad se rechaza espontáneamente.

Por definición, el comunismo es una doctrina económica y política que promueve una organización social donde no existe la propiedad privada ni la diferencia de clases, y donde los medios de producción los maneja el Estado, que los distribuye de manera equitativa, según las necesidades. Todavía hay gente que cree que la gente votó por Patria Libre porque desea aquí un régimen como el cubano.

Quien maneje esta idea obtendrá conclusiones erradas y deducciones confusas. Nunca olvidemos este dato: Si no hubiera tenido una candidata tan mala, Castillo nunca hubiera ganado. Basta comparar las cifras de la primera vuelta con los de la segunda para que salte a la vista. ¿Alguien cree que el profesor Pedro Castillo podrá hacer un gobierno comunista? Que quiera o lo intente es otra cosa.

Pronto tendremos la ocasión de comprobarlo. Pienso que no, primero porque no duraría mucho. Segundo, porque si no se modera, existen más que suficientes instituciones para moderarlo, a las buenas o a las malas.