La caída de Toledo

Abraham Lincoln decía que puedes engañar a todo el mundo algún tiempo, que puedes engañar a algunos todo el tiempo, pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.

Alejandro Toledo afronta la acusación más grave de corrupción a raíz del caso Odebrecht. Un presunto soborno de 20 millones de dólares por haberle adjudicado a la empresa brasileña la construcción de los tramos II y III de la carretera Interoceánica Sur. La Fiscalía ha pedido 18 meses de prisión preventiva y ya es un escándalo internacional.

Las informaciones aparecidas, como los 11 millones de dólares en las cuentas del empresario Josef Maiman, ameritan una seria investigación, que el expresidente se ponga a derecho y que colabore con la justicia.

Lo que todos se preguntan es si Alan García y Ollanta Humala (a través de terceros) fueron también sobornados por Odebrecht. El Perú es un país en el que la corrupción ha existido y reinado desde inicios de la república, y eso lo saben políticos, empresarios y lobistas.

La clase empresarial y gremial es bastante corrupta y cínica, y varios falsos valores del periodismo siguen haciendo de las suyas mirando hacia otro lado.

La consultoría empresarial ha sido muchas veces el medio empleado para lavar dinero y pagar sobornos a políticos y autoridades, y eso lo sabe hasta un niño. Basta con seguir la ruta del dinero y detectar quiénes se han hecho verdaderamente ricos a costa de la corrupción y el poder político. No es tan difícil. Al final todo se sabe.