Después de la alianza del Apra con el PPC, de la incorporación de Villarán a la plancha de Urresti, del cambio de partido de Guerra García, de la reafirmación de Keiko con los históricos del gobierno de su padre, y luego de la suma de Meche Aráoz a la plancha de PPK, y no sé cuántos cambios más, me quedan dando vueltas las siguientes preguntas :

¿Cuál es las visión de país que une a estos candidatos o agrupaciones políticas? Como la respuesta no es clara, surge la siguiente pregunta: ¿por qué quieren gobernar el Perú?

Solemos criticar a los votantes de este país por tratarse de una población muy poco informada o muy mal preparada para ejercer el derecho al voto. Sin embargo, cómo se puede criticar al votante cuando en las opciones existentes se traslucen las ansias de gobernar pero no la razón ni la visión por la cual los candidatos y sus planchas quieren ejercer este poder.

Los votantes rechazan todo esto y lo podemos deducir de los resultados de la última encuesta de GFK , donde el 17% de la población declara que votará en blanco o viciado y el 19% no ha decidido su voto aún. Es decir, el 36% de la población no sabe por quién votar.

Para que la democracia funcione, se requiere que los votantes ejerzan su deber con seriedad y responsabilidad, y además que podamos entender cuál es la intención de cada una de las personas que quieren ser elegidas, que los candidatos tengan claridad y definición en sus propuestas. Si esto no ocurre así, se daña la imagen de la democracia, lo que a largo plazo puede hacer que una parte de la población, desilusionada del sistema, opte por gobiernos populistas o algún tipo de dictadura, alternativas de gobierno que han demostrado tener consecuencias nefastas.

Parece difícil que esta situación se modifique a corto plazo. Los legisladores tienen muy pocos incentivos en modificar un sistema que les dificultaría mantenerse en el poder. Incluso si esto llegara a darse, difícilmente veremos cambios importantes en la política nacional mientras no haya un cambio en los políticos mismos. Es por ello que me parece destacable la actitud de la congresista Marisol Pérez Tello, quien ha decidido no postular a su reelección por no estar de acuerdo con la alianza de su partido (el PPC con el Apra). Es lamentable que políticos comprometidos deban alejarse de la política dejando espacio a aquellos que están dispuestos a todo.