El 11 de setiembre debe salir libre la terrorista Maritza Garrido Lecca luego de cumplir una condena de pena privativa de la libertad de 25 años. Sale a la edad de 52 años sin haberse arrepentido jamás de ser terrorista. Como ella, hay terroristas que ya salieron, pues en el Perú la cadena perpetua se reduce a 35 años de privación de la libertad, dado que nuestro sistema legal, consagrado en la Constitución, considera como el fin de la pena la reeducación, rehabilitación y reincorporación del penado a la sociedad.

Esto, que sabemos en nuestras prisiones es muy difícil de alcanzar, le devuelve a la sociedad, luego de años de carcelería, delincuentes más avezados que no se han rehabilitado ni reeducado, pero debemos recibirlos en la sociedad pues la ley se aplica hasta para los criminales más terribles.

Cuando a Garrido Lecca se le dieron 25 años, pensamos que era una eternidad, pero ya pasaron y ella tiene el derecho de salir de la cárcel. Sin embargo, tiene algunas restricciones por su tipo de delito: no puede trabajar para el Estado, no puede enseñar ni tener actividad política. Fuera de esto, puede hacer lo que quiera.

Pero ella es una terrorista, no se ha arrepentido, con lo cual su rehabilitación ha sido nula.

¿Qué debe hacer la sociedad con Garrido Lecca? Definitivamente liberarla y dejarla que viva como cualquier ciudadano, pero también es deber de nuestros gobernantes, durante toda la vida de Garrido Lecca, protegernos de ella. Sí. Es complicado, pero es una terrorista y conocemos las consecuencias del terrorismo.

Por ello, preparémonos como sociedad para vivir con

los terroristas que ya cumplieron su condena, protegiendo sus derechos fundamentales pero, sobre todo, los de todos los peruanos.