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A raíz de uno de los temas que se verán en CADE Ejecutivos este año (“Trámites y corrupción; de lo absurdo a lo lógico”) revisé una serie de trámites que, inspirados por objetivos loables -o al menos eso pensamos aplicando la buena fe-, terminan generando un contexto propicio a la corrupción porque los procedimientos son complejos, contradictorios -pues se adicionan normas sobre normas- y difíciles de entender para un ciudadano común.

Se sabe que una diferencia entre los países desarrollados y los países en vías de desarrollo es que los primeros cuentan con menos reglas y/o reglas flexibles de cumplimiento inflexible, en tanto que los países en vías de desarrollo tienen un exceso de reglas, pero de cumplimiento flexible. Es decir, el enforcement, la aplicación de la ley, falla. Este es un tema clave, pues lo que se observa en los países libres del flagelo de la corrupción es que las leyes son razonables y comprensibles, pero que el incumplimiento tiene alta probabilidad de ser detectado y, si ello ocurre, habrá un castigo severo.

Entre los procedimientos que mejor podían ilustrar este argumento tenía el de la licencia de funcionamiento -que llama la atención por lo extenso de sus manuales y el detalle al que llega- y ocurre que el procedimiento se volvió nuevo y lamentablemente centro de un debate tras el incendio del local de cines de Larcomar que tuvo el doloroso saldo de 4 muertos.

Es lógico que haya indignación ciudadana ante la escasa capacidad del Estado de generar condiciones de seguridad básicas en locales públicos. Además de identificar y sancionar responsables, si los hubiera, he visto que se piden más regulaciones y penas más severas.

Mi propuesta es que ante esta tragedia busquemos hacer las cosas de manera distinta y concentremos la atención del Estado no en los requisitos para la licencia sino en la supervisión y control rígidos e implacables del cumplimiento de las reglas básicas de seguridad. Poner más nomas que no se cumplen es lo que ya se ha hecho tras otras tragedias como Mesa Redonda o Utopia y no ha funcionado.