Fuerza Popular y Peruanos por el Kambio han pasado a la segunda vuelta electoral. Son dos organizaciones que tienen más similitudes que diferencias. Revisemos algunas de ellas.

Son organizaciones caudillistas. Sus símbolos son las iniciales de sus líderes (K Y PPK), sus candidatos no se decidieron en elecciones internas, sino en asambleas donde no hubo competencia.

Representan a la derecha. El fujimorismo, una derecha popular, algo más pragmática, pero que busca representar el orden y el conservadurismo social. El ppkausismo, una derecha económica, su lista parlamentaria estaba llena de representantes de gremios empresariales.

Ambos defienden el modelo económico surgido a partir de la Constitución del 93. Políticamente no hay mayor diferencia, Kuczynski apoyó a Keiko Fujimori contra Humala en el 2011. Sus candidatos al Congreso podrían haber ido indistintamente en una u otra lista. Sheput y Bruce, que van con PPK, reconocieron haber recibido invitaciones del fujimorismo. Alcorta y Galarreta, que postularon el 2011 con PPK, estuvieron en las nóminas ppkausas hasta días antes de inscribirse las listas parlamentarias, para finalmente postular por el fujimorismo.

Peruanos por el Kambio se organizó para permitir a Pedro Pablo Kuczynski postular a la Presidencia de la República. Fuerza Popular busca representar la herencia de Alberto Fujimori y, para ello, postula a sus hijos Keiko y Kenji Fujimori.

¿No deberían ponerse de acuerdo y evitarnos el gasto en una segunda vuelta? Fuerza Popular y Peruanos por el Kambio debieran anunciar una alianza de gobierno, con Keiko Fujimori como Presidente de la República y Pedro Pablo Kuczynski como Presidente del Consejo de Ministros. Tendrían una sólida mayoría parlamentaria y podrían llevar adelante las reformas necesarias en lo económico y lo político. Para qué negociar y hacer concesiones a la izquierda, si se puede gobernar con la derecha.