Diez comisiones analizarán facultades durante siete días

Serán diez comisiones del Congreso las que revisarán el pedido de facultades legislativas en cinco materias que presentó el primer ministro, Fernando Zavala, el pasado jueves. A estos grupos de trabajo se les ha exhortado a que analicen las solicitudes que les competen en siete días.

Este fue el acuerdo al que llegó ayer de forma unánime la Comisión de Constitución, la cual es presidida por el congresista fujimorista Miguel Torres.

Como es sabido, el proyecto con el que el Ejecutivo solicita facultades para legislar trata sobre las materias de reactivación económica, seguridad ciudadana, lucha contra la corrupción, agua y saneamiento, y la reorganización de Petroperú.

MECANISMO. Torres, quien propuso a qué comisiones deberían derivarse las propuestas, detalló los motivos de su planteamiento.

“Lo hacemos a efectos de solucionar un problema que ha sido generado por el Poder Ejecutivo. El Ejecutivo no tuvo mejor idea que emitir en un solo proyecto de ley una diversidad inmensa. Lo lógico hubiera sido que ellos presentaran proyectos de ley independientes por cada una de las materias”, dijo a Correo.

Explicó que debido a que el reglamento del Congreso sostiene que un proyecto de ley solo puede ser derivado a un máximo de dos comisiones, surgió la pregunta sobre a cuáles se derivaban.

En ese sentido, ayer muy temprano antes que se inicie la sesión de la Comisión Constitución, Correo consultó a la legisladora fujimorista Cecilia Chacón, presidenta de la Comisión de Presupuesto, qué puntos del pedido de facultades debía ser analizado por el grupo que dirige. “Tengo entendido que no hay ningún punto que tenga que ser visto por la Comisión de Presupuesto”, respondió. Sin embargo, en la propuesta aprobada el grupo de presupuesto debe analizar el ítem “Nuevo marco fiscal que afiance el compromiso con la sostenibilidad fiscal”, el cual es parte de la materia correspondiente a la reactivación económica.

Entre tanto, Luis Galarreta, vocero de Fuerza Popular, propuso reprogramar la semana de representación y que los parlamentarios ya no viajen a sus regiones del 26 al 30 sino una semana después. A fin de mes, entonces, podrían votarse las facultades.