La vicepresidenta de la República, Marisol Espinoza, ratificó ayer que sí renunció al Partido Nacionalista. Y aunque no quiso hablar extensamente del tema, recordó que su alejamiento a dicha agrupación se conoció públicamente a través de la prensa.
Todos los medios de comunicación han difundido la carta de renuncia (...) A confesión de partes, relevo de pruebas, declaró desde Piura.
Finalmente, la también congresista mencionó que dará un pronunciamiento oficial la próxima semana, debido a que en este momento se encuentra encargada del Despacho Presidencial.
Como es público, el personero legal nacionalista, Marco Barboza, presentó el pasado 23 de octubre una demanda judicial contra Espinoza, a fin de que se ordene la exhibición del original de su carta de renuncia. Sin embargo, dicha carta habría sido destruida porque supuestamente la congresista se arrepentió de su decisión.
INACEPTABLE. Horas antes, el presidente del congreso, Luis Iberico, criticó duramente el accionar del partido nacionalista y consideró que esta agrupación pretende secuestrar a la vicepresidenta de la República.
Esto es un secuestro judicial que se pretende hacer con ella, que coacta sus libertades. Creo que esto es inaceptable dentro de un sistema democrático, donde se respetan las decisiones de las personas, comentó.
MALTRATOS. En otro momento, mencionó que la denuncia contra la parlamentaria es parte de una retahíla de maltratos contra ella.
Espinoza ha sido víctima de todo tipo de tratos cuestionables de parte del gobierno y de ese partido (...) Yo lamento que se esté haciendo eso con una mujer que ha guardado toda la lealtad posible de su partido, pero por razones que conocemos decidió voluntaria y libremente apartarse, señaló. Sobre el tema, el congresista nacionalista Teófilo Gamarra dijo que no existe un ánimo de venganza contra Espinoza.